«Los sueños solo llegan si los perseguimos con todas nuestras fuerzas»

Lograron imponerse a un equipo colombiano de la Universidad del Rosario y otros dos equipos españoles —Alvaro Ortega y Gonzalo Herreros, de la Universidad de Cordoba, y Javier Alberite y Didier Martín, también de la U.P Comillas—.

En la competición participaron 108 equipos de más de 15 nacionalidades, así como una amplia representación española.

¿Qué supone para vosotros ser campeones del mundo de debate?

Una alegría enorme después de muchísimo trabajo. Llevabamos mucho tiempo esforzándonos y consiguiendo buenos resultados, pero siempre nos quedabamos a las puertas de conseguir el título mundial. Tras un año de muchísima preparación (torneos nacionales e internacionales), de tantos compañeros y amigos ayudando y

apoyando, es un honor para nosotros traer el título para España.

Creemos que es un premio a la perseverancia y a la idea que nos gusta mantener en nuestras vidas: los sueños solo llegan si los perseguimos con todas nuestras fuerzas.

¿Cómo ha sido la competición?

Un total de 108 equipos se enfrentaron en una fase preliminar con 9 rondas de debate. Cada ronda tiene un tema de debate diferente, permitiéndose a los equipos 15 minutos para preparar una posición que se les asigna aleatoriamente, sin acceso a internet o recursos electrónicos.

Tras ello, los equipos se ordenan del 1 al 108 en función de los puntos que han obtenido en la fase preliminar, clasificando los 32 primeros a fase final.

Este año, 14 equipos españoles consiguieron la clasificación, y nosotros conseguimos, por tercera vez consecutiva, ser el equipo mejor clasificado.

Tras ellos, los participantes se enfrentan a octavos de final, cuartos de final, semifinales y final, de donde sale elegido el campeón del mundo, teniendo cada ronda un tema diferente.

En la final los cuatro equipos que conseguimos llegar debatimos sobre política internacional, y una curiosa comparativa entre Estados Unidos y Venezuela. Tras ello, el jurado decidió proclamarnos campeones por haber desempeñado el mejor papel.

¿En qué os beneficia este galardón?

Además del reconocimiento al esfuerzo que mencionábamos, principalmente es una oportunidad para que el mundo de debate en España siga creciendo.

Es una demostración de que los españoles estamos aprendiendo rápido y ponéndonos al nivel de equipos latinoamericanos y anglosajones.

¿Y de cara al mundo laboral?

En casi todas las empresas es útil tener a gente que tiene buenas habilidades de comunicación. No es necesario ganar el mundial para que lo valoren, pero siempre ayuda y abre puertas.

Por ello no solo intentamos aprender a debatir y comunicar mejor, sino que aportamos nuestro granito de arena a la sociedad enseñando lo que aprendemos en nuestro día a día.

¿Cómo valoras el nivel del resto de países participantes?

En los últimos años hemos evolucionado muchísimo y ahora somos, junto a otros países latinoamericanos, una referencia dentro del mundo de debate. Ocho de los 10 mejores debatientes del campeonato son españoles, y los tres mejores equipos clasificados de las rondas preliminares también.

Aun nos queda trabajo por hacer y saltos que dar, pero vamor por el buen camino. Nuestro próximo objetivo es conseguir el mejor resultado posible en el campeonato europeo (en inglés, agosto 2017, en Tallin), y en en el mundial en inglés (diciembre 2017, México DF).

¿Qué falta en España para potenciar más aun esta competencia en colegios y universidades?

Coincidiendo con el aumento de buenos resultados, los últimos años han traido un considerable aumento también en el número de universidades y colegios que enseñan debate en sus aulas.

Sin embargo, todavía queda mucho por hacer. Principalmente, hace falta tomar consciencia por parte de las instituciones (públicas o privadas) de que las habilidades en comunicación son fundamentales en el proceso de aprendizaje de cualquier rama de estudio.

El debate no solo te ayuda a hablar mejor, también a pensar críticamente, estructurarte... y todo ello no solo es bueno para un abogado o político, también para un ingeniero, arquitecto, profesor o médico.

Si se tomara esa consciencia de lo útil que puede ser incluir el debate en planes de estudio oficiales, todos los alumnos españoles podrían beneficiarse de la suerte que hoy tienen solo unos pocos.