Semana 12 de embarazo: la cara está prácticamente formada

El tamaño del bebé en esta semana oscila entre los 5 y 6 centímetros, casi 7; el crecimiento sigue siendo muy rápido, de hecho en una semana llega a incrementar un 15% su tamaño. Para hacernos una idea sería como una pequeña lima. Su peso no superará los 14 gramos. A pesar de ello lo que más puede llamar la atención en una ecografía es lo mucho que se mueven los bebés y los pequeños «saltos» que dan. La madre no nota nada aún, como pueden entenderse por el tamaño del pequeño.

A nivel ecográfico va a ser la primera vez en la que se empiece a asemejar a un pequeño bebé reconocible por los padres . Ello se debe a que hacia el final de la semana 12 la cara está prácticamente formada, los brazos y las piernas se van alargando y aparecen paralelos en una posición muy característica que acompañará al feto en el inicio del segundo trimestre. Además a nivel del abdomen la hernia umbilical natural que tiene todos los embriones se cierra. Todo ello dará el feto un aspecto de bebé más reconocible.

Asímismo, se puede ver ya la vejiga dado que el sistema genitourinario del bebé empieza a funcionar de manera más afectiva, aumenta la producción de líquido amniótico por parte del feto. A pesar de ello la placenta sigue siendo una parte imprescindible en el metabolismo del feto dado que aún los riñones no pueden eliminar todas las sustancias de deshecho que produce el bebé. El sistema digestivo se va sofisticando, si tenemos suerte en alguna ecografía se puede ver al feto deglutiendo. Los genitales están completamente diferenciados, a pesar de que no siempre ecográficamente podamos distinguirlo.

La frecuencia cardiaca del feto oscila en torno a 150-160 latidos por minuto. A medida que avance el embarazo irá ralentizando levemente este ritmo, pero raramente descenderá por debajo de los 120 ó 125 latidos por minuto. La formación de los glóbulos rojos también sufre cambios dado que la generación de células sanguíneas pasa del hígado al bazo y la médula ósea (como en la vida extrauterina).

Entorno a esta semana y la próxima destacarán 2 hechos fundamentales, el primero es la mejoría paulatina de las molestas náuseas y vómitos que pueden habernos acompañado todo el primer trimestre. Además es importante la atenuación de las molestias en el bajo vientre que parecen de regla, que preocupan mucho en las primeras semanas de gestación.

Todo ello se debe a la estabilidad hormonal que va ocurriendo, dado que será la placeta la que, a partir de ahora, comience a producir las hormonas necesarias para la gestación, descendiendo con ello los niveles de beta-HCG en sangre, responsable principal de las náuseas.

A cambio pueden empeorar otros síntomas como el estreñimiento o la acidez, no dudes en consultar con tu obstetra porque tiene solución. Una dieta rica en fruta y fibra siempre ayuda. También el cambio hormonal se puede dejar sentir en la piel, ésta se torna más grasa y no es infrecuente la aparición transitoria de acné.

El aumento de peso no debería haber sido notable, es normal que aún no precises un cambio de ropa. Tampoco te preocupes si no te aparece la típica barriguita, el útero es difícilmente palpable dado que está comenzando a sobrepasar el pubis.