familia

Cómo actuar en caso de que un menor sea víctima de un delito por internet

Los padres deben tener muy en cuenta que la culpa de que se haya cometido un delito la tiene el delincuente

carlota fominaya

05/08/2012
Actualizado a las 01:30h.

Pere Cervantes y Oliver Tauste, ambos policías, y autores del libro «Tranki Pap@s» , un práctico manual para aprender a proteger a los niños y jóvenes de los peliegros de internet , lo saben bien. «Por nuestra profesión, estamos convencidos de que para evitar ... un delito lo principal es prevenir su comisión». Pero en el peor de los casos, si este se ha cometido, los padres deben saber actuar frente a ellos. Por eso estos expertso han querido compartir con nosotros una serie de consejos para saber qué hay que hacer si usted cree que un menor bajo su protección ha podido ser víctima de algún delito cometido a través de internet.

1. Es de vital importancia para la investigación que se realiza posteriormente que averigüe con exactitud qué ha ocurrido. Le ponemos un ejemplo: debemos saber con certeza si alguien ha utilizado una fotografía de nuestro hijo para crear un perfil en una red social donde lo insultan, si ha recibido correos electrónicos con amenazas, o si está siendo acosado a través de la red por un desconocido ara que le envíe fotografías desnudo.

2. Determine cuánto tiempo hace que se produce esa situación.

3. Averigue cuáles son las direcciones exactas de correo electrónico y de mensajería instantánea del autor (recuerde que la diferencia entre que haya un guión bajo, uno medio o un punto en una misma dirección de correo electrónico puede suponer que sean tres direcciones de correo electrónico diferentes.

4. Aporte las direcciones web y URL de las páginas web y los perfiles de las redes sociales donde hayan ocurrido los hechos.

5. Siempre es preferible que , a la hora de aportarlos, imprima todos estos datos a que los escriba en un papel. Si no dispone de impresora, puede ejectuar «capturas de pantalla» y grabarlas en una memoria externa para luego presentarla en las dependencias policiales.

6. Asesórese, si es necesario, en la comisaría o en el puesto de la Guardia Civil más cercano, ya que en ocasiones hay conductas que, aunque puedan parecernos reprochables, no son delictivas, por lo que deberían adoptarse medidas en otro ámbito, como el escolar, el familiar, la ayuda de terapeutas, psicólogos, etc.

7. Durante todos estos pasos, no olvide estar tranquilo, ya que una reacción desmesurada podría acarrear más problemas. Recuerde lo dicho en este manual sobre el diálogo con los menores: también sirve para solucionar otros conflictos.

8. Sin finalmente decide denunciar los hechos ante la Policía, es muy recomendable que el menor afectado acuda también, si es posible, a la comisaría. Allí podrá aportar información que no le haya contado antes, y sabrá explicar mucho mejor lo que ha estado ocurriendo. Piense que los policías en un primer momento sólo saben lo que usted y su hijo le cuenten.

9. Tenga muy en cuenta que la culpa de que se haya cometido un delito la tiene el delincuente.

Artículo solo para suscriptores

Si ya estás suscrito, inicia sesión