Javier Urra: «Hay padres que no quieren a sus hijos, anteponen su trabajo»

Considera, además, que es importante formarles para que sepan relacionarse con los demás, para que aprendan qué es la moral, la ética y dejarles ver «que el mundo no es ni será como nos gustaría que fuera». También los padres deben preocuparse por hacer que sus hijos sean adaptables, «elásticos» en las distintas situaciones, que sepan qué siente el otro, que sepan sentirse libres y autodominarse porque «la sociedad no es consciente de que el 50% de ellos después de casarse se separarán y, ¿les estamos preparando para ello? No», asegura Javier Urra.

«Ser padre es un lujo —prosigue—. Sin embargo, hay muchos progenitores que no quieren a sus hijos y anteponen su trabajo, el alcohol, las drogas... a estar con ellos y a prepararles con pautas como las mencionadas para afrontar la vida futura y que sean mejores personas. Pero no nos equivoquemos —advierte—, no hace falta ser una supermamá , basta con ser una madre "normalita" y preocuparse por tener un hijo simpático, tierno, respetuoso y que sepa cumplir con su deber. No es posible hacerlo todo perfecto».