Bruselas cita a Bolaños y Pons el próximo miércoles para tratar la renovación del CGPJ
Propone entablar un diálogo entre ambas partes que «no exceda los dos meses»
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El comisario europeo de Justicia Didier Reynders ha citado al ministro de Justicia Felix Bolaños y al dirigente del PP, Esteban González Pons, para una reunión la semana que viene en Bruselas para estudiar «la aplicación de las recomendaciones de la Comisión ... relativas al Poder Judicial en España» según figura en una carta que les ha enviado y que ha hecho pública esta mañana. «Hemos reflexionado sobre la mejor manera de facilitar la implementación de esta recomendación» dice el comisario en referencia a la mención que había hecho horas antes diciendo que la presidenta de la Comisión Ursula von der Leyen estaba involucradea en esta decisión.
Reynders propone mantener una primera reunión en bruselas el 31 de enero «por la tarde si les conviene a ambos» . Si se produce esa reunión sería la víspera del Consejo Europeo, también en Bruselas, en la que tiene que participar Pedro Sánchez.
Esta misma mañana Reynders había dicho que la presidenta Ursula von der Leyen tendría un papel central en su decisión y que esta se tomaría atendiendo al sentido de urgencia de las recomendaciones de la propia Comisión sobre la situación del Poder Judicial en España. En el comunicado oficial la Comisión explica que su participación en este asunto interno se justifica «para asegurar el cumplimiento de la legislación europea» y las recomendaciones de su informe anual sobre el Estado de derecho en España.
En este sentido recuerda que textualmente sus recomendaciones en 2022 y 2023 son «proceder a la renovación del CGPJ como cuestión prioritaria e iniciar, inmediatamente después de la renovación, un proceso con vistas a adaptar el nombramiento de sus jueces miembros, según las normas europeas sobre los Consejos del Poder Judicial» que prevén que sean los propios jueces los que tengan la mayor responsabilidad en este proceso. Hasta ahora el Gobierno ha insistido en que no quiere cambiar el método de elección de los miembros del CGPJ pero la Comisión insiste en que el diálogo debe tener como objetivo «la implementación de las dos partes de la recomendación de la Comisión».
También especifica que «este diálogo no debería exceder los dos meses» que es el tiempo que le queda a Reynders antes de que tenga que apartarse de sus responsabilidades para promover su candidatura a la secretaría general del Consejo de Europa.
Poco antes, a su llegada a la reunión informal del consejo de ministros de Justicia, celebrada bajo presidencia belga, Reynders se refirió a la ley de amnistía para recordar que los legisladores nacionales tienen que prestar mucha atención «a lo que afecta a la lista de crímenes europeos y el terrorismo es uno de ellos» , pero insistió en la tesis ya conocida de que la institución comunitaria expresará efectivamente su opinión cuando se haya terminado el proceso legislativo «y tengamos un texto definitivo. No pretenderán que lo hagamos a cada paso», explicó.
En el mismo consejo informal participaba el ministro de de Justicia, Félix Bolaños, que dijo haber hablado con Reynders el jueves por la tarde durante una visita al Museo de Bellas Artes de Bruselas organizada por la presidencia belga en la que «no hablamos ni una palabra de amnistía» porque según su versión y a pesar de lo que acababa de decir minutos antes en ese mismo lugar el propio Reynders, «la única preocupación de la Comisión es la renovación del CGGPJ». Bolaños justifica la tramitación de la ley de amnistía de la que opina que es «impecable sólida y conforme al derecho de la Unión Europea» y que esta percepción es «innegable».
Pero lo cierto es que la Comisión habla en su comunicación de que su objetivo es cumplir con los dos objetivos que ha venido plasmando en sus recomendaciones. Por un lado la renovación del CGPJ, pero también el cambio en el modelo de elección. En el PP se han mostrado muy satisfechos de que se reconozca esto último y del plazo de dos meses establecido. El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha celebrado que la Comisión Europea haya aceptado el esquema de supervisión que él planteó.
Ahora bien, ha dejado claro que la negociación para la renovación del CGPJ debe ir en paralelo con la aprobación de una «nueva ley» que profundice en la independencia judicial. En este punto Feijóo ha ido más allá del cambio de modelo del CGPJ y se ha referido también a una ley para «evitar que los ministros y altos cargos pasen del Consejo de Ministros al CGPJ o al TC». Es decir, el PP estaría planteando recuperar el texto que llegaron a tener cerrado con el Gobiero en la tentativa de negociación que naufragó en el último trimestre de 2022, y que era una norma integral para despolitizar la Justicia, no solo en lo relativo al CGPJ. Esos puntos llegaron a estar cerrados, siendo el único escolló el punto referido al modelo del CGPJ. Pero en el PP habían enfriado ese punto al constatar poco después de esa negociación frustrada que el Gobierno nombraba para el TC a Juan Carlos Campo y Laura Díez, dos personas que no podrían haber accedido a ese puesto en base al modelo que ambos partidos habían pactado.
Tras el pronunciamiento de la Comisión Europea, fuentes gubernamentales señalaban su agradecimiento por implicarse en la renovación del CGPJ «como pidió el Gobierno». Obviando que la propuesta de supervisión comunitaria nació del PP. Y evitando en todo momento hacer referencia al cambio en el modelo de elección. El Gobierno asegura que la preocupación de la Comisión por el bloqueo del CGPJ es máxima. Y apuntan que esta negociación «debe ser la definitiva» tras los intentos fallidos de 2018 y 2022.