Puigdemont no cede: exige el traspaso integral de la gestión de la inmigración

De esta manera, el expresidente autonómico catalán, que sigue fugado de la Justicia en Bélgica y mantiene el escaño en el Parlament, ha desmentido que su formación esté negociando con los socialistas rebajar la exigencia en la materia de inmigración. «Solo avanzaremos si Cataluña recibe la delegación integral de las competencias en inmigración, que es lo que acordamos», ha escrito en su cuenta de X, añadiendo que «alguno se ha pasado de listo», para desmentir una información de 'El Periódico'.

Los independentistas quieren la competencia «integral» de la inmigración, es decir, el control fronterizo, la capacidad de expulsión y la obligación del requisito lingüístico en catalán para los que aspiren a quedarse en Cataluña. Según Junts, la delegación integral se acordó en enero de este año, cuando el Gobierno necesitó los votos del partido de Puigdemont en la Cámara Baja para aprobar los primeros decretos-ley de la legislatura, a cambio de que la Generalitat, desde este agosto en manos de Salvador Illa (PSC), se encargase de la gestión de los inmigrantes.

En el acuerdo firmado por Junts y los socialistas, según informaron los secesionistas, se traspasará la delegación «integral» de las competencias de inmigración a la Generalitat (que se hará por la vía del artículo 150.2 de la Constitución mediante una ley orgánica específica para Cataluña, «para que sean el Govern y el Parlamento de Cataluña los que determinen una política propia, adecuada a las necesidades y a la realidad de nuestro país»), y se incluía, también, la publicación «inmediata» de las balanzas fiscales -que todavía no se ha hecho- y «la supresión» del artículo 43 bis de la Ley de Enjuiciamiento Civil, que se llevó a cabo después.

Ante la posibilidad de rebajar lo firmado o dilatar en el tiempo los acuerdos, Puigdemont ha advertido de que «si alguien piensa que dejando pasar el tiempo aceptaremos una solución a medias -al estilo de la financiación- van bien confundidos» y ha señalado, en un mensaje enviado al PSOE, de que «si alguien tenía planificado empaquetar los incumplimientos acumulados para resolverlos a su favor en una negociación presupuestaria, también se equivoca». Así, el líder de Junts estaría separando el traspaso de la inmigración a la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado para 2025, que el Ejecutivo no tiene asegurados.

Igualmente, Puigdemont ha lamentado lo que ha definido como «filtración» la publicación este jueves que los independentistas estarían negociando aceptar la gestión de la inmigración pero sin el control fronterizo y la capacidad de expulsión, y limitando la delegación de esta materia a los asuntos lingüísticos, sobre todo, «Si alguien piensa que haciendo filtraciones nos dejaremos arrastrar, todavía se equivoca más. Les hemos avisado cada vez, y no parece que escuchen. O peor: parece que no les importa un comino. En todo caso, pronto sabremos los entresijos».