Aviso de 'desahucio' al Hospital de fauna salvaje de Grefa en Majadahonda

En su notificación, el Ayuntamiento de Majadahonda, que dirige Lola Moreno, señala que «la Ley 40/2015 no permite la renovación ni la prórroga del actual acuerdo». Recuerda a Grefa que están a punto de concluir los 25 años por los que se firmó el mismo, e indica que para «proteger la fauna del entorno, se les ha comunicado el vencimiento con la antelación suficiente para que arbitren las medidas oportunas para la protección» de los animales que ahora tienen en su Hospital de Fauna Salvaje.

Además, aseguran estar «en coordinación y en consonancia con la Consejería de Medio Ambiente sobre este asunto». A este respecto, la Consejería se limita a señalar su «preocupación por el bienestar de los animales, y ofrecemos nuestra colaboración para que sean acogidos en el Centro de Recuperación de Animales Silvestres (CRAS)», en Tres Cantos.

Noticia Relacionada

El galápago europeo vuelve (con ayuda) para quedarse en las lagunas madrileñas

Sara Medialdea

La antigua gravera de El Porcal, ahora incluida en el catálogo de humedales, es el hogar de varios ejemplares de esta especie autóctona en peligro de extinción

Pero en Grefa no les salen las cuentas: creen que el convenio no se agota hasta 2023, porque aunque se suscribió en 1998, «su eficacia quedó en suspenso en tanto que el ayuntamiento acondicionaba los terrenos y ejecutaba las instalaciones a las que Grefa se trasladó en 2007». Algo que, recuerda el consistorio, ya tiró abajo una sentencia de julio de 2022, relativa a una reclamación de la aportación económica que el Consistorio debía abonar a Grefa en cumplimiento de dicho convenio.

La organización de defensa de los animales mantiene una relación de décadas con Majadahonda: desde 1981, aunque primero las instalaciones de su Hospital de Fauna Salvaje estuvieron situadas en otro terreno del municipio, 'Saltos del Sil'. En 1998 conveniaban trasladarse a otras instalaciones que el ayuntamiento haría en el Monte del Pilar, y así facilitar la ejecución de una operación urbanística en 'Saltos del Sil'.

La relación entre la ONG y el Gobierno majariego no ha sido una balsa de aceite, y se agrió especialmente durante el anterior mandato municipal. La actual alcaldesa, que llegó al cargo el pasado mes de mayo, ha heredado el problema que, dicen en su equipo, quiere solucionar con voluntad de diálogo y dentro de la ley, pero apuntan que Grefa ha levantado varias construcciones en la zona sin las preceptivas licencias y permisos. Es más, plantean que podrían llegar a otro convenio –con condiciones diferentes de las actuales– para que este espacio de naturaleza siguiera donde está, aunque reconocen que este proceso no se ha iniciado y que no sería algo rápido. En cuanto al presunto desalojo, matizan: «No vamos a ir a desalojar en enero», aunque sí apuntan que si no dejan las instalaciones una vez vencido el convenio, tomarán medidas legales.

Ernesto Álvarez, presidente de Grefa, confiesa estar «estupefacto» con la situación. Apela a la reputación de su institución, que «conoce todo el mundo» y que colabora activamente, de hecho, con la Consejería de Medio Ambiente en varios proyectos. Recuerda que «en la inauguración de las instalaciones del Hospital de Fauna Salvaje estuvo Esperanza Aguirre».

Respecto a la extinción del convenio, le parece que no es tan importante porque «se puede llegar a acuerdos; hay miles de fórmulas legales», como se emplean de manera habitual en este tipo de acuerdos entre administraciones y entidades. Cree que Grefa ha hecho mucho por Majadahonda con su instalación, desde la que hacen proyectos de reintroducción como «el del pigargo, en colaboración con el gobierno de Noruega, y otras iniciativas con Escocia y Francia; hemos puesto Majadahonda en la estratosfera».

Ambas partes se reúnen hoy en un encuentro del que podría salir alguna solución, o un paso más hacia la guerra abierta. En la ONG ya se plantean las consecuencias para los animales de este conflicto: «Como se muera un solo ejemplar, la cosa irá a Europa». Están dispuestos a llegar incluso al Tribunal de la Haya.