Más de 2.000 operarios y vehículos Eco para limpiar las zonas verdes de Madrid

La exigencia de tener una plantilla mínima cambia de forma radical el sistema actual. El contrato aún vigente no obliga a disponer de un mínimo de medios humanos ni materiales o equipamientos porque se fundamenta en un sistema de calidad medido a través de indicadores. Por ejemplo, se mide la altura del césped o los restos de suciedad y si alcanza un determinado valor que supera lo establecido, se penaliza a la empresa.

Ante la falta de resultados del sistema de indicadores, este nuevo contrato sí que define actuaciones concretas como cuántos riegos, siegas y podas deben llevar a cabo a lo largo del año. También se establecen las frecuencias y el personal mínimo dedicado a tiempo completo para realizar estas labores de lunes a jueves, que se intensificarán de viernes a domingos y festivos. Además se les obligará a realizar la recogida y retirada de residuos de forma selectiva, para depositar cada desperdicio en el contenedor correspondiente para su posterior reciclaje.

Además de los equipos ordinarios, la empresa que se encargue de este servicio tendrá que tener un retén compuesto al menos de un técnico, un oficial de jardinería y un oficial de fontanería. En horario diurno revisarán los lugares que ellos consideren para atajar incidencias. En el turno de noche, permanecerán en las instalaciones para acudir a cualquier intervención que se precise. Tendrán que atender los avisos que les lleguen tanto por parte de los servicios técnicos municipales, bomberos, Selur, Server, Policía Municipal o del personal del sistema de Avisos del Ayuntamiento.

Por primera vez se incluye en el pliego del contrato de zonas verdes el control de plagas como la oruga procesionaria, la galeruca o el escarabajo del olmo. Para estos casos se aplicarán insecticidas selectivos o la endoterapia , que consiste en la inyección del producto fitosanitario directamente en el tronco para evitar así contaminar el medio ambiente con aerosoles. Por lo general, estará prohibido el uso de herbicidas y abonado químico, salvo excepciones justificadas por los servicios técnicos municipales. Se emplearán métodos de control biológico de las llamadas «malas hierbas».

Al igual que se ha impuesto también para el futuro contrato de limpieza viaria, todos los vehículos y maquinaria usadas en el servicio deberán ser de nueva adquisición. Todos ellos deberán tener etiqueta Cero o Eco. Solo los camiones que tengan más de 3.500 kilos de masa máxima autorizada podrán ser también C. En cuanto a la maquinaria de jardinería deberá utilizar lubricantes rápidamente biodegradables y que no sean bioacumulativos o aceites regenerados.

A partir del año que viene tampoco se podrán plantar especies exóticas invasoras y se sustituirán estos ejemplares ya implantados por otros autóctonos de forma progresiva cuando se realicen trabajos de renovación del arbolado. El tamaño mínimo de los nuevos árboles también deberá ser mayor, al pasar de los 16-18 centímetros a los 14-20 actuales y tendrán quince días para retirar el tronco talado. En este sentido, también se favorecerán las praderas naturales que consumen menos agua que el césped.