Un acto de desagravio y un pasacalles pseudo religioso. En eso se convirtió ayer la marcha convocada por la Asociación Madrileña de Ateos en defensa de la libertad de expresión y manifestación y la aconfesionalidad del Estado, que recorrió durante dos horas las calles de ... Lavapiés. El acto, al que asistieron también grupos anarquistas, se celebró en protesta por la prohibición por la Delegación del Gobierno de la procesión atea que estos colectivos iban a celebrar el pasado Jueves Santo.
Unas 500 personas de lo más variopinto —republicanos ancianos, punkies, «porreros», hippies y «okupas»— recorrieron durante dos horas calles del barrio plagadas de simbología religiosa, llevando en andas una «tetera cósmica», símbolo del ateísmo, al que daban vivas, con gritos de «¡Un bote, dos botes, creyente el que no bote!».
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