Cumbre del Clima de Madrid: la capital se blinda con 1.500 antidisturbios

El plan de seguridad está supervisado directamente por la ONU, organizadora del evento, pero diseñado por la Secretaría de Estado de Seguridad, dependiente del Ministerio del Interior. El objetivo fundamental, como es lógico, es que todo transcurra sin incidentes, habida cuenta de que se darán cita en Madrid 54 jefes de Estado y de Gobierno.

Sin embargo, hay tres retos principales: por un lado, a nadie se le escapa que España se encuentra en nivel 4 por peligro de atentado; además, está el pulso secesionista de Cataluña: como avanzó este periódico, miembros de los grupos violentos Tsunami Democràtic y CDR intentan infiltrarse en las manifestaciones que tendrán lugar a lo largo de estos doce días de cumbre para conseguir proyección internacional; y también están los radicales antisistema que también quieren aprovechar las marchas para reventarlas y sembrar el caos en las calles.

Fuentes policiales indicaron a este periódico que la amenaza independentista está controlada y que, además, estos individuos se estarían «reservando» para el partido entre el Barcelona y el Real Madrid pospuesto para el día 18 de diciembre en el Camp Nou. «Siguen manteniendo contactos en sus aplicaciones encriptadas, pero ahora consideran que si muestran sus cartas en la Cumbre del Clima pueden tenerlo más difícil en lo que quieren montar en el encuentro futbolístico», explican fuentes policiales.

En cuanto a los grupos antisistema , como informó ABC, sí que se trabaja en evitar la llegada, sobre todo, de células de países como Francia, Italia, Grecia y Alemania, con los que los contactos entre autoridades son diarios. No hay que olvidar que de este último país es originario el llamado «black block», el método de guerrilla urbana utilizado por la rama más violenta de los autodenominados antifascistas y de los anarquistas, que son los más peligrosos. Por ello, desde el jueves pasado y hasta el día 14 se ha restringido el Acuerdo Schengen en España, para controlar puestos fronterizos terrestres, aeroportuarios y marítimos.

Desde la Comisaría Provincial de Madrid se ha trasladado a los agentes que durante los doce días de la COP25 se podrán prolongar las jornadas de trabajo policial y solicitar servicios extraordinarios. Los días más críticos son hoy, en la jornada de inauguración, mañana y el viernes 6, cuando está prevista la gran manifestación de «Fridays for Future» , según los datos que manejan los servicios de Inteligencia e Información. La protesta será pacífica, otra cosa es lo que intenten hacer los infiltrados a su término.

En el despliegue, además de los «antidisturbios», participan las unidades de Información, Subsuelo, Caballería, Guías Caninos, medios aéreos, comisarías locales y de distrito, y la seguridad privada. En cuanto a las Unidades de Prevención y Reacción (UPR), trabajan para el resto del día a día de la ciudad, pero también en apoyo de las UIP si es necesario.

No habrá cortes en torno a Ifema, puesto que otras ferias allí previstas se celebrarán en las mismas fechas; pero sí se instalará una comisaría en uno de los pabellones, amén del Centro de Coordinación (Cecor), en el complejo policial de Canillas.

Además, la Policía Municipal despliega a 800 agentes , que se encargarán, sobre todo, de labores de escolta en los traslados de los mandatarios (jefes de Estado y de Gobierno, así como los ministros y altos cargos de los casi 200 países que asistirán). Desplazamientos desde el aeropuerto, hoteles, centros culturales... Aun así, faltan por perfilar números e itinerarios.