Feijóo asegura que en el PP caben «los votantes que no entienden la deriva de los dirigentes de Vox»

«Que haya partidos que se aparten del cambio es cosa de ellos», ha comentado en referencia a la formación de extrema derecha, «porque en el cambio caben todos los votantes del PP, los miles de decepcionados del PSOE, y también los que no entienden la deriva de los dirigentes de Vox haciéndole favores al gobierno más disparatado de la nación española». «Se ve que el PP ahora tiene una nueva oposición», ironizó. Los populares saben que les toca apretar los dientes, a la espera de que Vox vuelva a dirigir hacia ellos su artillería más pesada.

Durante su intervención, con la que se ha clausurado el congreso provincial del PP de Orense, Feijóo ha lamentado que haya partidos «que se empequeñecen» en España, con un PSOE «individual e individualista» alrededor de la figura de Pedro Sánchez, pero también refiriéndose a Vox, «donde parece sobrar todo lo que no sea la facción que controla» a la organización radical. «Ellos a lo suyo, y nosotros a lo nuestro, que es España», ha subrayado, pero «que el PSOE no se las prometa muy felices con el nuevo capote que le han dado los dirigentes nacionales de Vox», porque el cambio –ha insistido– «es imparable».

Feijóo ha reconocido que «hay ciudadanos que no entienden lo de esta semana», fruto de un «chantaje» que Vox le ha presentado «a la persona equivocada». «Allá quien quiera comportarse como el independentismo, presentando chantajes a la nación», y ha defendido la «solidaridad» entre los territorios para resolver la situación crítica con la inmigración irregular que sufre Canarias. «No sé qué idea de nación se tiene cuando se pretende desentenderse de los problemas reales, cuando no existe la más mínima sensibilidad» con la crisis humanitaria del archipiélago. Y ha vuelto a los de Abascal para subrayar que «ninguna cortina de humo provocado por esta pinza [entre Vox y el PSOE] va a evitar que el Gobierno responda por los presuntos casos de corrupción que habitan en el Palacio de la Moncloa».

El líder del PP ha aprovechado para lanzar una advertencia al Gobierno respecto a sus intenciones de colocar al ministro José Luis Escrivá como gobernador del Banco de España. Feijóo fue claro: «con el PP, no». Los populares se cierran en banda ante la intención de Moncloa de «tomar las instituciones y ponga a un Tezanos al frente de cada una». «Sánchez quiere repartir el Consejo de Ministros en las instituciones del Estado», pero eso no es «lo que el Estado precisa». El aviso del jefe de la oposición se produce días después de que el Ejecutivo deslizara el nombre de Escrivá de manera sorpresiva, al no ser uno de los que se manejaba en la última semana, cuando PP y Gobierno habían intercambiado pareceres al respecto.

Núñez Feijóo ha participado este sábado en la clausura del 19º Congreso Provincial Extraordinario del PP de Orense. Y el adjetivo está justificado, porque por primera vez en más de treinta años, el presidente del partido en la provincia no tendrá el apellido Baltar. Tras los pobres resultados de las últimas elecciones municipales, donde el PP no recuperó la mayoría absoluta en la Diputación, el hoy senador Manuel Baltar renunció a revalidar la presidencia del ente provincial y dio un paso al lado en el partido, anunciando que cedería el poder orgánico.

Hace catorce años, Feijóo intentó en vano colocar a un afín al frente del PP orensano, pero chocó con los Baltar, padre e hijo. Este sábado, el apellido ni siquiera estaba en la carrera, apagado y erosionado por la amenaza que pende sobre Manuel Baltar, al que el Tribunal Supremo ha abierto juicio oral por ser cazado a 215 km/h en una autovía. Su padre José Luis abandonó la política en 2012, y dos años después fue condenado por enchufar a un centenar de personas en la Diputación, pocos días antes del congreso que ganó su hijo. Lo que Feijóo no logró en su día lo ha conseguido su sucesor en la Xunta, Alfonso Rueda.