Noriega enfría el intento de Podemos de añadir su marca a las mareas

Compostela Aberta recibe en Santiago a representantes de las mareas municipales de toda Galicia en las segundas jornadas que celebra para preparar la maquinaria electoral de cara a las municipales de 2019. Noriega ha considerado que las candidaturas de confluencia, que en 2015 lograron hacerse con las alcaldías de La Coruña, Ferrol y Santiago, siguen siendo «el único espacio capaz de disputar la hegemonía al PP en el ámbito municipal». En el encuentro participa el alcalde ferrolano Jorge Suárez, el de Teo; Rafa Sisto (Son de Teo); o el de Val do Dubra, Manuel Negreira (Anova). Pero ni el regidor coruñés, Xulio Ferreiro —que ha excusado su ausencia por motivos personales— ni el líder de En Marea, Luís Villares, que tenía otro acto en Sarria, han acudido.

Igual que ocurrió en los comicios de 2015, cada espacio municipal deberá la fórmula para presentarse a las próximas municipales. Entonces los de Pablo Iglesias permitieron a sus integrantes la adhesión de sus militantes a título individual en las mareas locales, pero con apenas unos meses de vida Podemos no quiso adscribirse como partido a la confluencia. Tras semanas de incertidumbre y mediante un tuit in extremis del propio Iglesias, el partido morado sí decidió sumarse a En Marea para las autónomicas. Pero desde entonces la integración no ha avanzado y Podemos aún no ha decidido tampoco si volverá a repetir con los mismos socios o en solitario el intento de conquistar la Xunta.

«Lo que no se puede es dar pasos atrás en lo que fue un espacio compartido en condiciones de igualdad donde todos nos identificamos con el espacio que construimos», ha apuntado Noriega antes de remarcar que «el objetivo» de las mareas es «superior», ya que radica en «disputar la hegemonía al PP» y no en «repartir fincas».

El regidor ferrolano , Jorge Suárez, ha llamado a que «la fraternidad» impere entre las diferentes mareas para «seguir colaborando desde la adscripción individual para ir cambiando las ciudades» . «Alcanzamos un pico de votos de 400.000 personas en unas (elecciones) generales y eso implica que hay muchísima gente que sigue confiando en nosotros», ha añadido. Esta semana la asamblea de Ferrol en Común acordó presentarse con la misma configuración sin adscripción de partidos a las elecciones de 2019 en las que tiene el reto de revalidar su gobierno.