Galicia administrará 29.000 dosis extra diarias de la vacuna contra el Covid, cuyo alza «preocupa»

Las cifras las ofreció el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, quien apuntó que la previsión pasa por concluir esta fase, que se llevará a cabo en los recuperados ‘vacunódromos’, el 30 de noviembre, en el caso de los septuagenarios, y el 5 de diciembre, en lo tocante a los de Janssen . Previamente, el día 23 de este mes, se tendría que haber dejado inoculada la dosis de refuerzo a los mayores de 80 años, que son citados en centros de salud. Adicionalmente, entrevistado en Radio Galega, Comesaña apuntó que la petición de doble pinchazo, para recibir también la vacuna de la gripe, ha disminuido levemente, y actualmente la piden el 90%. En todo caso, la campaña marcha de forma óptima, incluso «un poco por encima» con respecto al año pasado.

El Sergas aprieta el acelerador con las vacunas bajo la convicción de que son el mejor escudo contra una pandemia cuyo «crecimiento» sostenido genera «preocupación» y «cautela» entre los responsables de la sanidad gallega, «muy pendientes» por más que la Comunidad partiera de una «situación muy buena» y aún maneje «los mejores datos de la España peninsular». El principal motivo para que no se activen las alarmas: la presión asistencial aguanta, con 10 pacientes Covid en UCI (dos menos que la víspera) y 36 en planta (uno menos).

En todo caso, lejos de quedarse de brazos cruzados, de la mano de los expertos sanitarios, la Xunta viene de apostar por pedir —«en cualquier momento»— el certificado Covid a los visitantes de pacientes hospitalizados, medida que este domingo Comesaña esperaba que se remitiera «en las próximas horas» al Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, bajo la expectativa de contar con un aval favorable a tiempo para «finales de semana». La máxima prioridad, subrayó el conselleiro, pasa por blindar los hospitales y evitar brotes.

De ahí que, si bien dejó claro que « no descartamos una extensión de la petición» del pasaporte Covid —en gran medida, para persuadir al 6% que sigue sin vacunar—, por ahora se circunscribiría al ámbito sanitario y para proteger a los pacientes en posibles situaciones de especial riesgo o que presenten ellos mismos circunstancias que los hagan más vulnerables (véase enfermos inmunodeprimidos). De momento, no se va a pedir para acompañantes en consultas o pruebas diagnósticas, porque en estos casos es viable mantener la mascarilla colocada en todo momento.

En su línea, Comesaña se mostró cauto a la hora de trazar predicciones sobre posibles nuevas restricciones si se disparan los contagios o qué ocurrirá en Navidad. Recordó que la hostelería dispone de su propio protocolo, independiente de la incidencia en cada concello, e hizo hincapié en que, «ahora mismo», «dados los números» que se manejan, no está sobre la mesa endurecer las limitaciones . Pero tampoco es descartable. Del período navideño comentó que se desarrollará «con mascarilla en interiores, sin duda», y bajo una máxima de «prudencia». Ahí queda la «experiencia» de la pasada Navidad; y, sobre todo, «lo que pasó después», apostilló.