Feijóo acusa al Gobierno de no condenar con la suficiente rapidez y contundencia el ataque de Irán

Al poco de comenzar su mitin, Feijóo ha manifestado su condena al «ataque de Irán frente a Israel, sin titubeos tenemos que defender a las democracias en el mundo. Digámoslo claro, Irán es la principal amenaza desestabilizadora en la región de Oriente Medio, es necesario decir que Irán, Hamás y otros socios no pueden tener el amparo de ninguna democracia occidental, y en estos momentos no hay espacios para la vacilación. España debe permanecer al lado de las democracias y de sus aliados, y España debería de haber condenado de forma firme, y de forma determinante cuando empezaron los ataques y no ser el ultimo país de la Unión Europea en condenar esos ataques. Nuestro partido lo hizo desde el primer momento, el Gobierno de España no», ha concluido.

Dentro de ese tiempo dedicado a la política internacional, en su intervención ante medio millar de simpatizantes del PP vasco reunidos en la capital vizcaína, Feijóo ha presumido de estar al frente de un partido «serio» en materia de asuntos exteriores. Una formación, ha señalado, de la que se «confía en la Unión Europea y en las cancillerías extranjeras». Al mismo tiempo, ha añadido que «Francia, Alemania, el Reino Unido, Italia, Estados Unidos, Canadá... todas las grandes democracias del mundo han condenado el ataque» de Teherán sobre territorio israelí.

En esa línea, ha lanzado un mensaje a los efectivos de las Fuerzas Armadas que cumplen misión fuera de las fronteras españolas: «Quiero mandar también, en nombre del Partido Popular, nuestro apoyo incondicional a las tropas que tenemos desplegadas en aquella zona, que están presentes». Además, y reflexionando sobre el papel de España, ha aseverado que «si somos una de las grandes democracias del mundo nuestro lugar es estar con los demócratas, defendiendo los valores occidentales frente a la barbarie, ahí estará siempre el Partido Popular, y lamento que el Gobierno de España haya quedado, otra vez, de último en la defensa de las libertades y la defensa de las democracias occidentales», ha sentenciado.

Ya metido en faena electoral, Feijóo hizo una encendida defensa del PP vasco como una fuerza que ha ayudado a «vertebrar Euskadi» así como «al conjunto de España, como una de las naciones más antiguas del mundo, llena de pueblos con distintas culturas, con lenguas, todas ellas españolas y una forma de entender una de las naciones más atractivas del mundo». El presidente del PP, que pudo abrazarse con veteranos dirigentes del PP vasco como Carlos Iturgaiz o Carmelo Barrio, entre otros, reivindicó la originalidad que históricamente ha tenido en muchos posicionamientos de su formación, incluida la defensa en el País Vasco de la Constitución, del Estatuto de Gernika y «de los fueros», algo que los populares hicieron, recordó, incluso «con la vida de nuestros compañeros». En las primeras filas le escuchaba María del Mar Blanco, hermana del concejal asesinado por ETA en 1997 en Ermua. Igualmente, y haciendo alusión al nacionalismo gallego, aseguró que «asistimos a una carrera, que yo la viví hace años en mi tierra, y que es patrimonializar los símbolos. El euskera sólo es de los nacionalistas, el Estatuto sólo es de los nacionalistas, la bandera de Euskadi sólo es de los nacionalistas... pues yo digo que aquellos que intentan secuestrar la bandera de Euskadi y se burlan de la bandera española, les decimos: nosotros queremos las dos, y vamos a tener estas dos banderas siempre en nuestras sedes», señaló entre aplausos, mientras aludía a dos chicos jóvenes que sentados juntos portaban una ikuriña y una rojigualda, respectivamente.

Ahondando en la paternidad en muchos planteamientos, Feijóo acusó al PNV de estar «copiando» el programa de De Andrés. Y llegó a pedir el voto a los electores peneuvistas, ya que «ningún vasco vota al PNV para aplicar la política del cierre de empresas de Sumar y de Podemos; ningún vasco vota al PNV para aplicar las políticas de vivienda y las políticas laborales de Bildu y ningún vasco vota al PNV para aplicar la política de despilfarro y de la deuda púbica asfixiante del Partido Socialista».

Ante unas encuestas que dibujan una derrota del Imanol Pradales frente a los de Otegi, Feijóo señaló, incluso con tono sarcástico, que «cuando al PNV le vienen mal dadas se refugia en nuestras ideas y en nuestras propuestas. A veces pienso si en esta campaña se han leído el programa de Javier de Andrés y su candidato se lo ha leído y lo recita de memoria».

En la misma línea, tanto De Andrés como sus dos teloneras en el acto, la secretaria general del PP vasco, Esther Martínez, y la presidenta del PP de Vizaya, Raquel González, enfatizaron las propuestas anti okupación que ahora esgrime Pradales, cuando a su juicio el PNV no ha combatido este fenómeno desde el Gobierno de Vitoria.

El candidato popular a lendakari tampoco olvidó mencionar otros asuntos como el migratorio en su discurso. En concreto aludió al fraude que según relató cometen muchos inmigrantes que son perceptores de la Renta de Garantía de Ingresos (RGI), ya que algunos, dijo, la reciben pese a «estar en Marruecos o en Egipto, y se les sigue pagando la RGI», que, denunció, dos tercios de quienes la cobran «están en condiciones de trabajar, en lugar de estar cobrando más de lo que gana un autónomo».