Las confesiones de Zapatero a Rufián: «Juan Carlos I me ayudó mucho en el dialogo con ETA»

Hacia el final de la misma, Rufián le pregunta a Zapatero sobre nombres propios, entre los que están el actual jefe del Estado, el rey Felipe VI, y su padre y predecesor, Juan Carlos I.

El expresidente del Gobierno deja claro que su relación con el padre del actual Rey fue más que fluida y le ayudó mucho a sus políticas.

Zapatero no oculta que con Juan Carlos I tuvo una relación muy cercana, pero sí señala que el final de su reinado le dejó con mal sabor de boca. «No traicionaré mi trayectoria. He tenido afecto claro. Me muevo entre el afecto y la traición», admite.

En este sentido, el expresdiente apunta que «Felipe VI encarna aquello que su padre no hizo bien». «Él lo encarna: la seriedad, la responsabilidad... Y siempre que he podido le he aconsejado, entre comillas. Alguna vez he hablado con él como expresidente. Es una persona educada, amable, correcta... Me parece que es un gran profesional», admite.

Zapatero no llegó a conocer a Felipe VI como jefe del Estado, pero de su época como Príncipe de Asturias guarda buen recuerdo. «Tenía una reunión una o dos veces al año. Me llamó siempre la atención cómo se estudiaba los dossiers. Era una personalidad muy distinta al padre», señala.

Para el expresidente socialista, Juan Carlos I era «pura intuición política» y pone dos ejemplos muy claros de hasta qué punto se involucró en sus políticas.

«A mi me ayudó mucho en el dialogo con ETA. Estuvo desde el primer día comprometido. Comprometidísimo. Para mí eso está ahí, fue muy importante. Es más: incluso en algún momento, en una posición institucional delicada, trató de ayudar con el Partido Popular. Hasta ahí se mojó. Tenía esa visión, esa intuición política que solo se puede hacer desde el diálogo».

En la comparación entre Juan Carlos I y Felipe VI, Rufián tercia que al actual monarca «quizá le falta esa mano izquierda, nunca mejor dicho...» y Zapatero, sin enmendarle la plana, sí apunta a que debe profundizar más en el concepto de diversidad de España.

«Yo he vivido lo que se conoce como la estructura del Estado, que luego es muy diversa... Hay que entender cuál es su formación (la de Felipe VI), como quien dice cuál es la formación de un juez. Es inevitablemente una formación que tiende y encarna la unidad de la Constitución. Estos altos conceptos que ponemos a los altos dignatarios, a los jefes de Estado, que luego cuando tienes que enfrentar algo más dinámico y complejo. Esto es algo en lo que tiene que profundizar la monarquía, una visión de diversidad de España. España es diversa y para que sea, debe ser diversa», remata el expresidente.