La lucha de un padre contra la Generalitat Valenciana por el suicidio de su hija

«¿Cómo pueden dormir dejando a una chiquilla así?», es la pregunta que rebota continuamente en la cabeza de este hombre desde que Isabel, su hija, que padecía anorexia nerviosa, acudiera a las consultas de una psicóloga y de una psiquiatra de la Unidad de Salud Mental del Hospital de Requena (Valencia). No entiende, pues, como estas profesionales no activaron el protocolo antisuicidio establecido por la Generalitat ante el notorio empeoramiento de su pequeña, quien llegó a relatarle a ambas «un plan de suicidio concreto».

«Ha pensado en defenestrarse pero como vive en un segundo piso sabe que puede hacerse mucho daño y puede no perecer en el intento. Se ha realizado cortes en el antebrazo y se ha informado de cómo hacerlo correctamente pero de momento no se ha atrevido», describe la psiquiatra en un parte médico de una entrevista cara a cara con la menor tres días antes de que se suicidara lanzándose por la ventana de su casa.

Rafael y el resto de su familia consideran que las dos doctoras siempre se mostraron «distantes» y culparon al entorno familiar del estado de la adolescente. Según explica su padre, les llegaron a decir que «se la querían quitar de encima» y que «solamente quería llamar la atención». Incluso, preocupados por el consumo de marihuana que había tomado como hábito Isabel para «acallar las voces de su cabeza», la psiquiatra «de manera déspota» les contestó que «hay gente que se pone más de drogas y cubatas y no les pasa nada» y «los niños tienen que experimentar».

Incrédulos, alarmados y desesperados, los padres de la menor consultaron a otros especialistas después de varios casos de sobreingesta de medicamentos que les llevaron a acudir a Urgencias. Todos ellos les avisaron de que las señales de riesgo eran evidentes y que debían actuar con prontitud. Sin embargo, continuó el desamparo hasta el tráfico final. «Nos sentimos abandonados por la Administración», cuenta Rafael, quien ha interpuesto una querella por homicidio imprudente contra las dos terapeutas, la cual ha sido rechazada por la jueza.

Ante esta situación que consideran «indignante y vergonzosa», ya han presentado un recurso al fallo de la magistrada de no admitir a trámite la denuncia y han solicitado la intervención del Síndic de Greuges, equivalente al Defensor del Pueblo valenciano, organismo que ha instado a la Generalitat a dar explicaciones sobre la actuación de Sanidad en el caso de la menor. «Hoy nadie me la va a devolver, pero sí quiero evitar que otra familia tenga que pasar por esto», defiende este padre coraje que como él dice, «lucha contra molinos de viento».