«Mi hijo estudia todas las asignaturas en valenciano en contra de mi voluntad»: la inmersión lingüística a una familia ucraniana
Hablamos Español revela discriminaciones a castellanohablantes y la Conselleria garantiza que Matemáticas o Conocimiento del Medio se imparten en la lengua base
Hablamos Español denuncia que alumnos reciben libros de texto en valenciano para asignaturas en castellano
Alicante
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Iniciar sesiónHablamos Español ha difundido en su web y remitido a la Generalitat Valenciana un informe de casos de «discriminación» a familias castellanohablantes -o inmigrantes y hasta huidos de la guerra en Ucrania- por imposición de la inmersión lingüística hasta el ... extremo de no aprender sus hijos ninguna asignatura obligatoria o «dura» en este idioma a pesar de que la votaron en la consulta y está garantizado por ley.
«Estamos desesperados, nos sentimos perdidos y solos... y no sabemos por qué no podemos ejercer nuestro derecho a educar a nuestra hija en español (tendrá, ni más ni menos, hasta la Secundaria en valenciano y con la lectoescritura». Se trata de un testimonio concreto y -según Hablamos Español- «la frase que ilustra a muchos mensajes que hemos recibido de familias con niños escolarizados en esta comunidad y resume el sentir general de estas familias».
Consultadas por ABC fuentes de la Conselleria de Educación, Cultura, Universidades y Empleo, aseguran que al menos una de estas dos materias principales sí se tiene que impartir en castellano y es opcional que sean las dos incluso en esa misma lengua, o la otra en valenciano.
De entrada, aclaran una cuestión terminológica de mal uso de la denominación: «En la actual ordenación del sistema educativo no existe el término materias troncales». Aparte de ese matiz, por el que hay que actualizarse tras la ley LOMLOE y referirse a materias obligatorias u optativas, señalan que «la ley reconoce el derecho a estudiar en la lengua base Matemáticas o Conocimiento del Medio, pero no ambas, y el centro educativo tiene autonomía para determinar cuál de las dos se estudia en lengua base, o incluso si ambas se estudian en lengua base».
Y además de esas garantías de la normativa y de dejar la última palabra en colegios e institutos, los responsables autonómicos abogan porque se busque el equilibrio. «En todo caso, en la Conselleria optamos por recomendar que una (asignatura) se estudie en lengua base y la otra en lengua no base, a fin de garantizar el equilibrio entre ambas lenguas oficiales, siempre con un mayor peso de la lengua base, que es el espíritu de la ley», subrayan.
No obstante, en algunos centros parecen no sentirse aludidos y perduran las artimañas denunciadas ya por Hablamos Español en la anterior legislatura, con la derogada Ley de Plurilingüismo impulsada por Compromís en el Gobierno autonómico presidido por el socialista Ximo Puig.
En este informe de la asociación que preside Gloria Lago, se incluye documentación interna que revela como -por ejemplo- hay un instituto donde únicamente se imparten en castellano la propia asignatura de esta lengua, Religión, Educación Física y Valores Éticos y Cívicos.
«Calificaciones bajas por el valenciano»
Uno de los casos más traumáticos es el de una familia en el exilio por la guerra, que relata sus dificultades en casa. «Soy madre de dos hijos que estudian en una escuela pública de Valencia. Somos una familia ucraniana, mi hijo mayor cursa 4.º de Primaria y el menor, 1.º de Primaria. Este año entró en vigor la ley sobre la elección de la lengua principal de enseñanza», indica.
«Yo voté por la enseñanza en castellano porque, para una familia recién llegada, es la única opción realmente asumible. Sin embargo, por falta de alumnado en el grupo de castellano de primero de Primaria, no se abrió esa clase. Como resultado, mi hijo menor estudia todas las asignaturas íntegramente en valenciano, algo que ocurrió en contra de nuestra voluntad», se lamenta esta madre.
En el día a día, esta inesperada inmersión lingüística al estilo de Cataluña les ocasiona trastornos y frustración con las notas y el rendimiento académico. «Esto nos genera serias dificultades: yo no domino el valenciano, por lo que no puedo ayudar a mi hijo con los deberes ni supervisar su progreso, mientras que mi otro hijo -el mayor- actualmente estudia en castellano, pero anteriormente estuvo en un programa mixto en castellano y valenciano, lo que le causaba muchos problemas y calificaciones bajas en las asignaturas impartidas en valenciano».
Como triste conclusión, esta madre opina que «para los niños extranjeros, es extremadamente complicado aprender simultáneamente dos lenguas nuevas: castellano y valenciano», algo que parece razonable y que avala la tesis de Hablamos Español y otras entidades contrarias a la inmersión lingüística, que apelan al criterio pedagógico de usar como idioma base del aprendizaje la lengua materna del alumno. En este caso, ni siquiera se puede, pero resulta más arduo intentarlo por partida doble.
Por eso, esta familia pide a la Administración competente que habilite «mecanismos» para asegurar a los inmigrantes la elección del castellano en las aulas.
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El informe de Hablamos Español da cuenta asimismo de quejas también arrastradas del pasado por no facilitar la información y comunicaciones de los centros educativos en los dos idiomas oficiales, en especial, también para los hogares de extranjeros recién llegados a España. O el problema de contar con libros de texto en valenciano paradójicamente para materias que se imparten en castellano, tal como publicó esta semana ABC.
Como acerca de este otro aspecto, en la Conselleria aseguraron «no tener constancia de quejas», también han lanzado una recomendación genérica para todo tipo de reclamaciones. «Las familias tienen reconocido en el Decreto 195/2022 (en proceso de revisión) el derecho a presentar reclamaciones ante el centro educativo», puntualizan.
«Deben resolverse en primera instancia por la dirección del centro educativo, quien tiene entre sus competencias (art. 132.d LOE) la de garantizar el cumplimiento de las leyes y demás disposiciones vigentes; en segunda instancia, corresponde a la Inspección de Educación velar por dicha garantía del cumplimiento de la normativa vigente», han recordado.
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