Los Presupuestos de 2018 tensan el Pacto del Botánico con acusaciones entre PSPV y Podemos

Las cuentas de la Generalitat para 2018 serán, probablemente, las últimas de un ejercicio completo antes de la convocatoria de elecciones en 2019 , lo que está llevando a aumentar el nivel de exigencia de Compromís y, especialmente, de Podemos para ver cumplidos sus compromisos más relevantes y poder vender logros de cara a los comicios, además de marcar distancias.

El área social (Educación, Sanidad y Políticas Inclusivas) suele ser siempre la que mayor problema genera a la hora de ajustar el presupuesto, y la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, no quiere dejar de percibir un buen bocado para iniciativas como la Renta Valnciana de Inclusión, que ha iniciado este miércoles su andadura en las Cortes.

A su exhaustiva supervisión se une la presión de Podemos , quien este martes avisaba de que no están en disposición de apoyar las cuentas «a día de hoy» , una posición en la que se siguen manteniendo a la espera de los avances que puedan darse en las negociaciones durante este fin de semana.

El secretario general de la formación morada, Antonio Estañ, considera que el problema radica en una «descoordinación» entre las consellerias, una «falta de comunicación» entre las partes y en una «escasez de valentía para tomar decisiones» por parte de «ciertos sectores» del Gobierno valenciano. En su opinión, existen objetivos de transformación del Botánico que «no se están cumpliendo» y que se tratarán en la comisión de seguimiento del pacto intentarán convocar para la próxima semana tras meses de espera.

Las medidas que exige Podemos están cuantificadas en 300 millones de euros y algunas de ellas no cuentan con el visto bueno del Consell. En determinadas propuestas, admitieron, podrían ser más flexibles, excepto las que tiene que ver con Sanidad, Vivienda, la tasa turística, el sistema de retorno de envases (SDDR) y la gestión forestal. Pero precisamente la tasa turística y el SDDR son dos de los puntos que prácticamente se descartan por parte de la Generalitat para incluirlos en las cuentas del año que viene.

Las advertencias de la formación morada han tenido este miércoles respuesta pública por parte del PSPV. Su portavoz en las Cortes, Manolo Mata, ha afirmado que «no pasa nada» si los presupuestos se tienen que prorrogar este año . «No hay que sacralizar las cuentas, pues Mariano Rajoy ha demostrado que no ocurre absolutamente nada por que se prorroguen. Se aprobarán cuando se tengan que aprobar», ha indicado.

Mata ha señalado, como réplica a Podemos, que los partidos del Pacto del Botánico están en el «terreno común» de trabajar por las personas, por lo que las «chulerías no valen» . Además, ha remarcado que las cuestiones que plantea la formación morada no están en el acuerdo general del pacto de Gobierno. Todas las «polémicas» sobre el Presupuesto, ha comentado, son «en interés de las personas», pues se está discutiendo si se pueden hacer más viviendas públicas, eliminar antes los barracones o tener más personal para tramitar los expedientes de la dependencia, si bien los recursos son «limitados por culpa del Gobierno central».

El portavoz socialista también ha manifestado que el sistema de retorno de envases no es una «prioridad» y que la tasa turística hay que hacerla «técnicamente bien».

Más suave se ha mostrado el síndic de Compromís, Fran Ferri, quien ha asegurado que no se plantea la prórroga de los Presupuestos porque hay cuestiones que no figuran en las cuentas actuales, como la Renta Valenciana de Inclusión o el Plan Edificant, por lo que habría que realizar modificaciones presupuestarias para incluirlas. Ferri ha manifestado su confianza en que habrá acuerdo entre los socios de Gobierno y las cuentas saldrán adelante «como siempre se ha hecho».

Por su parte, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha afirmado que confía en contar finalmente con el apoyo de Podemos a pesar de las «tensiones lógicas» que a su juicio se producen en toda negociación. Sin embargo, ha insistido: «Gobernamos desde la diversidad; esto es democracia y buscamos fórmulas de propuesta común. Lo importante es que la sociedad valenciana debe seguir creando oportunidades para los ciudadanos desde la confianza, la honradez y el diálogo».

Desde el Consell mantienen que el documento de las cuentas se aprobará antes del plazo legal marcado para el 1 de noviembre.