Un juez fijó custodia compartida del niño asesinado en Sueca al no ser informado de la condena de maltrato del padre

La cronología judicial evidencia una separación tormentosa desde el pasado verano, cuando en julio de 2021 ambos cónyuges presentaron una demanda de divorcio de mutuo acuerdo ante el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número de 5 de Sueca, en la que establecieron un convenio regulador con custodia compartida respecto al menor asesinado.

Tan sólo un mes después, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 del mismo municipio, condenó al presunto parricida como autor de un delito de malos tratos en el ámbito de la violencia de género. Por ello, le fue impuesta una pena de cuarenta días de trabajo en beneficio de la comunidad, ocho meses de alejamiento y prohibición de comunicación con respecto a su expareja y dieciséis meses y dos días de prohibición de tenencia de armas.

Así, el fallo de esta sentencia del 12 de agosto, establecía custodia y patria potestad del menor a favor de la madre y suspendía cualquier régimen de visitas del progenitor condenado, que además debería abonar una pensión mensual de 200 euros para el menor.

No obstante, en septiembre, los padres ratificaron en este mismo juzgado el convenio regulador establecido en junio en el que se acordaba la custodia compartida del niño asesinado presuntamente por su padre, según ha matizado en un comunicado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana ( TSJCV ).

Para llegar a este punto, ninguno de los dos informaron al magistrado de la existencia de un procedimiento penal por malos tratos ni de la sentencia que fijaba la custodia en favor de la madre y suprimía el régimen de visitas que querían recuperar tan solo un mes después.

Este nuevo caso de violencia vicaria , a través de la que el agresor pretende hacer el mayor daño posible a su expareja a través de sus hijos, ha conmovido a toda la sociedad, que no ha dejado de enviar muestras de condolencias a la familia y mostrar su total rechazo a toda clase de violencia machista.

Según relataron algunas personas del entorno de la familia, el presunto asesino de su hijo llegó a expresarle a su exmujer que «le iba a amargar la vida» . Incluso la abuela del menor y madre del parricida, alertó a los agentes de la Policía Local minutos después de las dos de la tarde que su hijo «estaba loco e iba a matar a su nieto» .

Los agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local, alertados también por la madre del menor, acudieron al domicilio del acusado donde encontraron al cuerpo sin vida del niño con dos puñaladas en el cuello efectuadas con un cuchillo de cocina. Según fuentes del Instituto Armado, el hombre acusado de matar a su hijo a cuchilladas pasará este martes a disposición judicial.

Los servicios médicos acudieron de manera urgente a la calle Rafael Hervás de Sueca, donde tan solo pudieron confirmar el fallecimiento del chico de once años. Tanto la madre como la abuela del menor sufrieron ataques de ansiedad , por lo que fueron evacuadas al Hospital de Alzira.

La Generalitat Valenciana ha convocado para este martes tres minutos de silencio a las puertas del Palau para condenar «una de las expresiones más deshumanizadas y más crueles» de la violencia machista que es la violencia vicaria.

Familiares de la madre han descrito al hombre como un «monstruo» que «ha ido a por el más débil» y a «hacer el daño más grande: condenar a la madre a vivir con ese sufrimiento».

Marta, una de las primas de la madre del menor, se ha pronunciado así en declaraciones a Europa Press tras el parricidio registrado este domingo: «Nos estamos haciendo a la idea. No damos crédito a lo ocurrido y estamos intentando asimilarlo», ha manifestado.

Ha indicado que la familia era «consciente» de que el padre era un maltratador : «Siempre lo habíamos sospechados, sobre todo psicológicamente, pero nunca piensas que va a ser capaz de hacer algo así», ha dicho.

La familia ha asegurado que la madre está «destrozada» y se siente «culpable", y ha añadido que el hombre «nunca» había mostrado actitudes violentas hacia el niño: «Dentro del monstruo que era nunca le había gritado . Con el niño es el con el único con el que se comportaba como una persona un poco normal», ha aseverado.

En esta línea, ha descrito al arrestado como «un maltratador de manual». «Primero ha anulado a la mujer como persona, ha intentado alejarla de su familia y luego la ha maltratado físicamente. Aún así tenía poder sobre ella de hacerle creer que era buena persona y que quería a su hijo. Ese poder que ha tenido sobre ella le ha dado poder para quitar la vida de su hijo», ha agregado.

Ante esta situación, la familia de la madre ha pedido que se catalogue el caso como violencia vicaria porque «no hay margen a otra cosa» y que sobre el padre «recaiga todo el peso de la ley». Y ha insistido: «El monstruo ha decidido lo peor, arrancar la vida de su hijo y también la de su madre, porque ella está condenada a seguir respirando pero nadie le devolverá la vida», ha lamentado.