El TSJC condena a un exdiputado de CiU a 9 años y medio de inhabilitación por soborno y prevaricación

En concreto, el Alto Tribunal condena a Crespo a dos años y seis meses de inhabilitación especial para el cargo público y a pagar una multa de 450.000 euros por el delito de soborno y a 7 años de inhabilitación especial para cargo púbico por un delito de prevaricación.

El tribunal concluye que Crespo y Valls concedieron facilidades a la empresa de Petrov, Development Diagnostic Company (DDC), para la construcción del complejo 'Plaça del Braus' -que nunca llegó a construirse- a cambio de "cantidades relevantes" para el patrocinio de los clubes de hockey y fútbol de la localidad durante cuatro años, además de varios regalos personales.

El empresario, tras el acuerdo con el alcalde, decidió patrocinar a ambos clubes: 90.000 euros por temporada para los dos equipos, en concreto 60.000 euros para el club de hockey y 30.000 para el de fútbol. Además, con el fin de tratar bien al alcalde y conseguir facilidades, Petrov invitó a Crespo, a su mujer y a uno de sus hijos a viajar a Rusia un fin de semana del 15 al 17 de febrero en febrero de 2008; la invitación se hizo extensiva a la arquitecta Pilar Gimeno, a su esposo y a su hijo. Asimismo, el 10 de septiembre de 2010 Petrov regaló a Crespo "en atención a su condición de alcalde" un reloj de 2.200 euros que el TSJC le obliga a devolver.

El trato de favor a la empresa se tradujo en que en un pleno municipal se aprobó una propuesta de bonificación del 50 por ciento de la cuota tributaria del impuesto sobre construcciones pese a que "ni la obra prestaba características que merecieran tal catalogación ni la ordenanza fiscal aplicable admitía ningún tipo de bonificación".

En la sentencia, notificada hoy a las partes, el alto tribunal catalán condena por los delitos de cohecho y prevaricación a Crespo, para quien la fiscalía solicitaba dos años y medio de cárcel y ocho de inhabilitación. Según recoge la sentencia, Crespo «convino y en todo caso recibió las dádivas indicadas, vinculadas a su condición de alcalde y con la finalidad de facilitar el desarrollo de una obra compleja sin que se exigiera el cumplimiento de las condiciones impuestas legalmente».

«En su calidad de Alcalde y por ello funcionario público, era responsable principal de hacer cumplir las propias resoluciones municipales, por ello la abstención le es directamente reprochable y debe calificarse como autor del delito, sin que sea admisible su ignorancia dada la envergadura de la obra», añade el escrito.

El tribunal también condena al exconcejal de Urbanismo de Lloret de Mar Josep Valls a ocho años y medio de inhabilitación y a una multa de 300.000 euros, mientras que a Petrov la impone 7 años de inhabilitación y 450.000 euros de multa.

El abogado de Crespo y de Valls, Manuel González Peeters, ha anunciado que recurrirá la sentencia.

Crespo, que fue diputado de CiU en el Parlament durante la pasada legislatura , renunció a su escaño en mayo de 2015, después de se fijase el inicio del juicio contra él y otros cuatro acusados por el caso Clotilde de supuesto cohecho y prevaricación.

Por otra parte, el TSJC absuelve a la arquitecta de DDC, Pilar Gimeno, y al que era presidente del club de hockey, Joan Perarnau, y condena a la empresa rusa a indemnizar al Ayuntamiento de Lloret con los 133.754 que le fueron bonificados.

La sentencia contra Crespo y Valls tiene un voto particular del presidente de la sala y del propio TSJC, Miquel Ángel Gimeno, que considera que los condenados no incurrieron en un el delito de prevaricación.