Suscribete a
ABC Premium

José García Domínguez

Obituario de la CUP

Colau pretende clonar el modelo, tan eficaz en los viejos buenos tiempos, del PSC: una alianza estratégica de la izquierda española

Pese a esa vieja quimera racionalista, modernizadora y europeizante, la que da forma a la imagen de sí mismo que desde sus orígenes ha querido proyectar el catalanismo político, aquí, ahora igual que antes, siempre acaba imponiéndose el espíritu nihilista, iconoclasta, patibulario y dinamitero de ... Durruti. Es enfermedad que no tiene remedio. Porque lo que en el fondo hay tras las bullangas de Gràcia es la misma querella fratricida que enfrentó en la Barcelona de cuando la guerra a los heterodoxos del POUM y las milicias de la CNT con el PSUC, el partido de orden que ansiaba el monopolio absoluto en el ámbito de la izquierda catalana. En aquel entonces, los de Andreu Nin fueron exterminados por las bravas, sin contemplaciones. Idéntico destino, si bien solo simbólico, al que aguarda a la alegre muchachada de la CUP. Y es que Cataluña resulta demasiado pequeña como para que quepan los de Colau y nuestra atrabiliaria fotocopia comarcal de Batasuna. Alguien sobra. Y nada indica que sea la alcaldesa.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia