La ANC también rechaza la iniciativa de Aragonès de un acuerdo de claridad y recuerda que ya se votó la independencia en 2017

En un comunicado, enviado este lunes, la ANC ha sostenido que el proceso de debate y diálogo social que ha planteado el Govern catalán para este acuerdo, que tras debatirlo en Cataluña se presentará a La Moncloa, es «como mínimo poco claro, largo y pesado, pero sobre todo ignora el camino ya recorrido de demanda frustrada de acuerdo con las instituciones españolas«.

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«Los últimos intentos son muy recientes y el Estado no está dispuesto a dialogar ni antes, ni ahora ni nunca«, ha sostenido la entidad independentista que apuesta por la vía unilateral. De esta manera, la ANC se alinea con Junts y la CUP, partidos que de momento han rechazado la iniciativa de Aragonès, quien presentará la propuesta antes de las elecciones generales de diciembre de 2023.

La ANC ha acusado al Govern de querer distraer con una propuesta «que no ha sido avalada por nadie», que no tiene el apoyo de la mayoría independentista (ni de los grupos constitucionalistas) y que fue rechazada por el Parlamento de Cataluña en una propuesta de resolución presentada por los comunes en el último Debate de Política General.

«Habiendo agotado su propio margen de diálogo fracasado, y sin más recorrido, a este Govern colaboracionista no le queda más vía que abandonar su apuesta hacia la nada«, ha mantenido la entidad que preside Dolors Feliu y que vive en una crisis interna desde hace semanas.

Desde la ANC se ha añadido, en esta línea, que si el actual Govern, formado solo por ERC, «no está dispuesto a materializar la república catalana, debe dimitir y convocar elecciones plebiscitarias para hacer la independencia«.

La entidad también ha criticado que el acuerdo de claridad pretende alcanzar «un referéndum donde la propia nación catalana renuncie a la independencia autoimponiéndose condiciones abusivas« que impidan la victoria de la opción independentista con mayoría de votos.

Así, ha sostenido que históricamente los acuerdos de claridad han servido para «controlar unilateralmente los referéndums de autodeterminación», dejando en manos de las instituciones Estatales su reconocimiento, tal y como ocurre en Canadá, país del que toma Aragonès el concepto básico.

Este posicionamiento es el resultado del debate que mantuvo el Secretariado Nacional de la asociación este fin de semana, después de que el presidente autonómico anunciara debates con los partidos, la ciudadanía y las entidades tras las municipales.