Elecciones municipales Castilla y León: Se buscan candidatos para el 28-M

Para el resto, estas cifras son imposibles. La desafección de la sociedad de la política, reconocen, es una de las dificultades a las que se enfrentan a la hora de 'reclutar' aspirantes, una realidad que se palpa más en el medio rural donde el nombre pesa más que las siglas y de ahí que haya no pocos ejemplos de cambios de un partido a otro en función de cómo el concejal o el alcalde se haya visto apoyado durante la legislatura.

El PP fue en 2019 el partido con más candidaturas ya que llegó a 2.211 municipios. Con ese objetivo trabajan actualmente, señala el presidente del Comité Electoral de Castilla y León Ángel Ibáñez, que confía en poder incluso superar esa cifra. «Seguimos el ritmo preciso en la elaboración de listas», apunta e insiste en que «no hay ningún problema ni retraso» sobre la base de que «los últimos quince días antes de la fecha de cierre son los más intensos».

Los populares tienen buenas sensaciones a la hora de diseñar las candidaturas porque, apunta Ibáñez, «hay un plus de ilusión con el proyecto de Feijóo y un aire de cambio a nivel nacional en el que las municipales son el primer paso». Asegura que «no necesitamos ir a la búsqueda de aspirantes de otras formaciones», aunque al mismo tiempo reconoce que «hay interés de muchas personas por ensanchar el PP porque perciben que hay que aglutinar el voto en torno al PP», en referencia a CS y Vox.

En cuanto a la renovación de las listas, el dirigente popular mantiene que ésta es importante, sobre todo en aquellos municipios en los que no se gobierna. No obstante, matiza que lo más complicado es concurrir en los municipios de la España vaciada y, en este sentido, alaba a «esos alcaldes veteranos que se mantienen durante años al frente de los ayuntamientos». Y es que lamenta cómo «cuesta conseguir que los vecinos se impliquen y falta relevo generacional».

En el PSOE de Castilla y León también reina el optimismo en la confección de las listas que llevan a cabo «sin especiales dificultades», de forma que confían en alcanzar las mismas cifras que en 2019, cuando consiguieron llegar al 97,1 por ciento de los municipios, año en el que lograron llegar a la totalidad del censo en las provincias de Ávila, Salamanca, Valladolid y Zamora.

Los socialistas están más avanzados que el resto de partidos, especialmente en las capitales de provincia, donde presumen, de tener candidatos «comprometidos» frente a los del PP que «llegan obligados», afirma la secretaria de Política Municipal del PSCL, Alicia Palomo. Así, explica que las candidaturas «se hacen durante los cuatro años, no en los tres últimos meses» y, sobre todo, «pisando el terreno». Habrá muchos aspirantes que repiten, pero «también relevo generacional». A todos se pide «compromiso con la tierra y una hoja de ruta y, aunque no es requisito estar afiliado al PSOE, sí hay líneas rojas: «Si no defiende la sanidad pública, no puede estar en este partido», señala Palomo. Pero sin duda, la gran dificultad, es el elevado número de municipios de la Comunidad, de ahí que Burgos, la provincia con más, sea la más difícil de completar.

Ciudadanos se enfrenta a su cita electoral más complicada tratando de frenar la fuga tanto de afiliados como de quienes han sido la cara de la formación desde las elecciones de 2019. Véase el presidente de la Diputación de Zamora, Javier Requejo; el portavoz en el Ayuntamiento de Valladolid, Martín Fernández Antolín, o el del Ayuntamiento de Burgos, Vicente Marañón. Pese a todo y con la losa que supone que las encuestas electorales vaticinen la desaparición de la formación naranja, su presidenta en Castilla y León, Gemma Villarroel, reconoce que aunque «hay gente que ha decidido pasarse a otras siglas, otros han decidido continuar e, incluso, hay quien se ha acercado a nosotros». Sí admite, no obstante, que «tendremos menos listas que en 2019», un hecho del que culpa también a las aparición de nuevas plataformas y partidos locales.

Para Villarroel. la mayor complicación para conseguir candidatos surge de «la desafección que los ciudadanos tienen de la política porque ven que las cosas no cambian y están hastiados, así que al final abandonan». Pese a todo, la presidenta de Ciudadanos en la Comunidad se atreve con un 70 por ciento al referirse al porcentaje de aspirantes que que repetirán bajo las siglas de CS. Para los nuevos, exige «que sean honestos y sin cuentas pendientes con la justicia». Tampoco es necesario estar afiliado, aunque sí se recomienda.

En Vox parten con la tranquilidad que supone el que incluso en el peor de los casos el número de listas será muy superior a las que presentaron en el anterior cita electoral. Los de Abascal están realizando un trabajo «muy de campo» con el que buscan 'pescar' a muchos descontentos con otras formaciones. De hecho, señalan fuentes cercanas a la formación, en algunos casos se renuncia a aceptar ciertas ofertas para garantizar la idoneidad de los aspirantes. «Nos trasladamos a los municipios porque es ahí donde la gente se encuentra a gusto, te ve cercano y ve lo que se puede hacer» aseguran, aunque reconocen que «Vox no es el partido más fácil para presentarse».

Podemos se presenta con Izquierda Unida en las grandes ciudadesde la Comunidad salvo en Zamora, Segovia y Ponferrada. Según el responsable de la formación morada en Castilla y León, Pablo Fernández, su previsión es presentar al menos 20 candidaturas más que en 2019, lo que permitiría superar el medio centenar de ese año, aunque reconoce que la ausencia de una estructura territorial «lo hace muy complicado».

Fernández cree que «hay mucha gente que comulga con nosotros pero hay cierta desafección de la política y eso lo hace difícil» más aún si, puntualiza, «PP y PSOE repiten candidatos desde hace décadas». Ante la dificultad de concurrir en las municipales en una Comunidad con tantos municipios, Podemos-IU se centrará en los más poblados si bien «también nos presentaremos en algunos municipios de 70 o 90 habitantes», aclara.