Nueva ‘vuelta’ a la Atención Primaria con la presencialidad rural garantizada

Es su intención, dijo, que esa «necesaria» reestructuración permita «potenciar y mantener» el modelo de asistencia rural «garantizando la presencialidad» en todo el territorio y abordarlo sobre la «base del análisis de la situación actual y las previsiones de futuro para cada zona básica de salud y el diálogo» con los profesionales, entidades locales, ciudadanos y sindicatos. Y es que este ha sido un asunto peliagudo en la anterior legislatura, cuando la propuesta de la anterior consejera, Verónica Casado, desató numerosas críticas de municipios y supuso una brecha en el anterior gobierno de Cs y PP. Consciente de que será un trayecto «complicado», entre otras cosas por la falta de médicos -el «gran mal de la Sanidad de Castilla y León y de España», llegó a calificar-, mostró su disposición a hablar de analizar las características de cada zona y de tomar medidas que permitan la asistencia en los pueblos.

Además, prevé dotar de más respaldo económico a este área sanitaria. Así, Vázquez anunció que se incrementará «progresivamente» el peso de la Atención Primaria en el presupuesto de Sacyl hasta llegar al 20 por ciento del gasto sanitario, para mantener a la región a la cabeza de este apartado a nivel nacional.

También afrontará en esta legislatura otro de los grandes retos: la reordenación de los recursos humanos. Se hará a través de un nuevo plan para «dimensionar» y «adecuar» plantillas con medidas como incentivar el desempeño de los puestos de difícil cobertura, muchos de ellos precisamente en el medio rural, «superando lo contenido en el decreto de 2019». Para hacer frente al preocupante déficit de determinados profesionales, Vázquez anunció una nueva normativa mediante la que se podrá «prolongar la permanencia en servicio activo hasta la edad de 70 años» . Dentro del apartado de personal, mostró la intención de dar «estabilidad» a los sanitarios a través de un «calendario bienal de ofertas públicas de empleo».

Si algo guiará esta nueva etapa como «fórmula de trabajo», dijo, será la «participación, el diálogo, el consenso y el acuerdo». En esa línea tendió la mano a los grupos políticos -les convocará en las «próximos días»- para, «más allá de las diferencias», alcanzar un «gran pacto» por el «presente y el futuro» de la sanidad regional , un sistema que requiere un nuevo modelo de financiación autonómica que tenga en cuenta parámetros como la dispersión, el envejecimiento e incluya el «coste real de los servicios públicos» en una comunidad que «padece» una infrafinanciación.

Por otra parte, se refirió a la importancia que ha adquirido Salud Pública con la llegada del Covid. «La pandemia ha hecho tomar conciencia del carácter esencial del área», recordó, y la Consejería no quiere volver a cometer los «los mismos errores». Así, impulsará y potenciará ese departamento que contará con una nueva ley, una «reorganización del sistema de alertas» y se «superará la idea de calendario vacunal para elaborar un Programa de Inmunización que mantendrá a Castilla y León como pionera en política de prevención».

Prioritario será también reducir las «inasumibles» listas de espera, tanto las quirúrgicas como las de pruebas diagnósticas y de consultas externas que se afrontarán con «el plan de choque» que ya anunció hace días el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco. Esta legislatura servirá también para impulsar la transformación digital, explicó, en la que se seguirá apostando por la telemedicina y «las interconsultas no presenciales». En este punto, el consejero se marcó, además, como reto poner en marcha una «historia clínica electrónica única» que abarque también el ámbito sociosanitario.

Entre otras medidas, el consejero garantizó la libre elección de centro sanitario a través de un nuevo decreto que mejore la «equidad», se desarrollará la atención integral de la salud mental, los cuidados paliativos o los pacientes crónicos y se seguirá potenciando la «humanización» en la asistencia. Además, anunció que se reforzará el papel de la enfermería y se potenciará la investigación y la innovación, para lo que se crearán «nuevos institutos de investigación biomédica».