Dejan dos cabezas de lobo para recibir al presidente de Asturias: «Barbón, no se negocia con chantajistas ni terroristas»

Esta protesta llega después de que el lobo haya sido incluido en el LESPRE, el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y Catálogo Español de Especies Amenazadas, lo que disminuye mucho las posibilidades de que pueda ser cazado. Esto ha sido entendido por el sector ganadero como un ataque directo, dado que se encuentran seriamente tocados por los asaltos de los cánidos en sus terrenos.

La reacción de Barbón ha sido condenar enérgicamente los hechos, que ha calificado como «violentos y un delito ambiental» y que están siendo investigado por la Guardia Civil.

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La Asociación para la Conservación y Estudio del Lobo ibérico ha dejado claro que apoyan este hecho con un elocuente mensaje: «Se recoge lo que se siembra. Si el Gobierno agroganadero astur quiere matar lobos, aquí está. Barbón, no se negocia con chantajistas ni terroristas», le señalaron, junto a una foto con las cabezas de lobo.

El Plan de Gestión del Lobo del Principado ha sido muy criticado desde su entrada en vigor, dado que no ha acabado de contentar a los ganaderos ni tampoco a las asociaciones medioambientales.

Barbón, socialista, se ha enfrentado numerosas veces a las políticas generales con respecto a este asunto. De hecho, el propio presidente de la región ha señalado que entiende las protestas al respecto.

Prueba de su enfrentamiento con Moncloa es que ha pedido incluso por la vía judicial que permita la caza de un lobo en concreto en los Picos de Europa, que tienen perfectamente localizado, pero que por la normativa nacional aún sigue libre y provocando serios problemas. El motivo: la ley nacional exige que haya un censo actualizado de lobos en todas las comunidades, algo que en Asturias ya existe.