Armengol reconoce a la Princesa como la «digna representante» de la España del 2023
La presidenta del Congreso reivindica el país como un sujeto «consciente y orgulloso» de su «diversidad»
La socialista hace un guiño a las lenguas cooficiales con citas de autores vasco, gallego y valenciano
Estos son los versos citados por Armengol y este es su significado en castellano
Tras dos meses en el cargo, la presidenta del Congreso de los Diputados, Francina Armengol, se enfrentaba este martes al discurso más importante, por el peso histórico del momento, que probablemente pronunciará como tercera autoridad del Estado. La expresidenta autonómica de Baleares, ... de convicciones republicanas, era la encargada de pronunciar las palabras previas a la jura de la Constitución de la Princesa Leonor. El esquema ha sido el mismo que en 1986, cuando Don Felipe hizo idéntico juramento ante el también socialista Gregorio Peces-Barba. En un «acto histórico», ha reconocido a la Heredera al Trono como «la digna representante» de la España del año 2023.
Desde el estrado elevado que se instaló para las autoridades, donde normalmente figuran los asientos de la Mesa del Congreso y la tribuna de oradores, Armengol ha alabado a Doña Leonor, el día de su decimoctavo cumpleaños, como una mujer joven, «cercana al sentir mayoritario de su generación» y consciente de los retos que tiene por delante el país. Ha echado la memoria 37 años atrás, al juramento de Don Felipe, hoy Rey y entonces Príncipe, para recordar el compromiso de su padre de «guardar y hacer guardar la Constitución».
El recuerdo lo ha evocado incompleto, porque ha borrado de aquella cita histórica a Don Juan Carlos, uno de los artífices de la actual democracia, a quien no le ha dedicado ni una sola mención. El padre del Rey, que vive en Abu Dabi desde hace tres años tras varias polémicas fiscales, solo estará este martes presente en el acto privado de la Familia Real, para celebrar la mayoría de edad y el compromiso constitucional de su nieta.
El discurso de la presidenta, inspirado en el de Peces-Barba y a la vez muy alejado de la loa a la Monarquía que hizo este entonces, ha presentado carga política. El PP solo se ha arrancado a aplaudir, tímidamente, cuando ha visto que su líder, Alberto Núñez Feijóo, empezaba a batir las palmas. Vox ha guardado un respetuoso silencio. Un contraste evidente con la larga y cerrada ovación que el hemiciclo ha destinado a la Princesa solo unos minutos después.
La tercera autoridad del Estado ha apelado a una España «plural, abierta y europea», una España que encara sus desafíos «desde la diversidad», con las Cortes Generales reunidas este martes, solemnemente, en la «sede de la soberanía popular». La expresión, que no ha sido un desliz y estaba así preparada en su discurso, contrasta con el término recogido en la Carta Magna, soberanía nacional, que repele a cierta izquierda y nacionalismo por su oposición al concepto de la nación española.
«Este país somos hoy»
«Este país somos hoy. Un país cohesionado, respetuoso, consciente y orgulloso de su diversidad», ha incidido la presidenta del Congreso, en un alegato que quería reflejar la intención que pretende imprimir a su mandato. No ha faltado el guiño a las lenguas cooficiales, impulsadas por ella desde que se constituyeron las Cortes el 17 de agosto, con saludos y despedidas en catalán, gallego, español y euskera. Ha citado en sus respectivos idiomas a Andrés Estellés, poeta valenciano; Felipe Juaristi, escritor vasco; y Xohana Torres, poeta gallega. Ha faltado un autor en castellano.
Parca en referencias históricas, en una ceremonia que no se celebraba desde 1986 y que no se sabe cuándo se repetirá, Armengol sí ha reivindicado la necesidad de «abordar con urgencia la crisis climática» y «la lucha contra la violencia de género».
Hace 37 años, Peces-Barba ensalzó la Monarquía como un símbolo de «la unidad y la permanencia del Estado». Este martes Armengol solo ha afirmado: «El juramento de la Princesa supone el firme compromiso con este presente libre y democrático, enraizado en un pasado que no olvidamos para así disponer de un mejor futuro». La presidenta, antes del juramento de la Heredera, ha pedido a sus señorías que se pusiesen en pie para escuchar tan solemne momento.
Doña Leonor ha jurado la Carta Magna, como su padre antes que ella, y Armengol ha rematado la ceremonia. La socialista ha parafraseado a Peces-Barba para gritar tres vivas coreados al unísono por diputados y senadores. «¡Viva la Constitución! ¡Viva España! ¡Viva el Rey!». La ausencia de nacionalistas, independentistas, Podemos e Izquierda Unida ha facilitado el aplauso unánime a la Princesa. Hace casi cuatro décadas, el secretario general del Partido Comunista de España, Santiago Carrillo, no tuvo problema en asistir a la jura de Don Felipe. Hoy la lealtad institucional se ha diluido, pero ahí queda, para la historia, la «digna representante» de España.