Fomento anuncia 19 millones de euros para el tren Zaragoza-Teruel-Valencia

Pastor se refirió, entre otros proyectos de inversión, a la modernización de esta línea férrea que conecta Aragón con la costa valenciana, largamente reivindicada por ambos gobiernos regionales y, con especial ímpetu, por la provincia de Teruel. Es el único tren del que disponen en la provincia turolense, pero el estado de esta infraestructura hace que sea escasamente competitiva, ni para el tráfico de viajeros ni para el de mercancías. No está electrificada, sus pendientes son demasiado pronunciadas en diversos puntos, las limitaciones de velocidad son muy acusadas en varios de sus tramos y, en suma, requiere de un amplio programa de renovación de trazado que no acaba de llegar. Hace años —en la etapa de Rodríguez Zapatero— el PSOE incluso prometió reconvertir la línea en corredor integrado en la red ferroviaria de Alta Velocidad, pero la promesa quedó aparcada.

En Teruel consideran que, dada la situación, se conformarían con que la línea fuera modernizada en profundidad, que se quedara como ferrocarril convencional pero en condiciones realmente competitivas. Para empezar, electrificando el trazado . Pero este objetivo avanza igualmente con lentitud . El año pasado, los gobiernos aragonés y valenciano manejaron estudios técnicos que apuntaban a que esta línea férrea necesitaría de unos 220 millones de euros para que fuera realmente competitiva, tanto para el tráfico de viajeros como de mercancías. De ahí que el anuncio hecho ayer por la ministra de Fomento quede lejos de las reivindicaciones y aspiraciones de ambos territorios. Ana Pastor afirmó que será en 2016 cuando se ejecute la partida de 19 millones de euros para obras de readecuación y mejora del trazado, partida que ya estaba reservada en las cuentas del presente ejercicio. Afirmó que es una inversión que se comprometen a ejecutar en firme y «en todos sus términos».

La línea Zaragoza-Teruel-Sagunto tiene un interés especialmente estratégico para Aragón. No solo es el único corredor ferroviario que atraviesa la provincia de Teruel y que la comunica con el exterior —una provincia muy necesitada de revulsivos socioeconómicos— sino que es la única línea férrea que le da a Aragón salida directa hasta el Mediterráneo.

De esa importancia da fe la apuesta que, desde hace varias semanas, está realizando la multinacional estadounidense General Motors (GM). Ha elegido este ferrocarril para llevar hasta Sagunto la producción de coches que sale de su planta de Figueruelas (Zaragoza) y que tiene como destino la exportación en barco desde el litoral mediterráneo. Sin embargo, han quedado de manifiesto las limitaciones que ofrece el trazado.

La semana pasada, un tren cargado con vehículos de GM que iban a Sagunto tuvo que dar marcha atrás al no poder remontar una de las pendientes de esta línea en la provincia de Teruel, el puerto de Escandón. La lluvia había mojado los raíles y eso, unido a la pronunciada pendiente y a la escasa velocidad que en esa zona pueden alcanzar los trenes, obligó al convoy a dar marcha atrás y volver a la estación de ferrocarril de Teruel capital.