La subida de la luz y de las materias primas 'siembran' la inquietud en el campo de Córdoba

En el caso de la electricidad la subida de la factura es más que evidente . Los datos oficiales señalan que el valor medio del megavatio/hora en el mercado mayorista se situó de media en octubre los 202 euros, el doble que hace un trimestre antes y seis veces más que en las mismas fechas de 2020.

El presidente de la Comisión Agroalimentaria de la Confederación de Empresarios de Córdoba ( CECO ), Francisco Torrent, resaltó que «el crecimiento de la luz , del gas y del gasóleo agrícola en los procesos productivo, así como el de la maquinaria en la recolección de los cultivos y en el riego , están influyendo de una manera muy negativa , aunque en nuestro sector intentamos sobreponernos a todas las dificultades». Hay que recordar, que según los registros oficiales de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, en Córdoba hay actualmente 252 industrias agroalimentarias , siendo mayoritarias las dedicadas a la producción y comercialización de grasas vegetales como el aceite de oliva (suponen el 31 por ciento ) y las cárnicas (11%).

Otros problemas que mencionó el también consejero delegado de Aceitunas Torrent es la falta de componentes básicos para los procesos productivos como la sal o barnices para los envases , además de que «los costes de transporte se han disparado hasta un 2.000 por ciento en empresas como las conserveras vegetales y el precio de los contenedores en los puertos se han duplicado». «Cuando se traslade este aumento de los gastos a los consumidores no sabemos si el cliente dejará de comprarlos», recalcó.

El presidente de Dcoop, Antonio Luque , ya ha asegurado que ve «irremediable» elevar los precios del aceite de oliva en los lineales si siguen al alza los costes de producción y de la logística a nivel internacional.

Torrent aseguró no tener constancia de ninguna firma agroalimentaria en Córdoba que haya paralizado su actividad por estas cuestiones, pero no descartó que puedan producirse en el futuro «si continúa el desabastecimiento de algún insumo para poder trabajar». A su juicio, « estos problemas no parece que tengan una fácil solución a corto plazo , ya que es posible que pasen dos o tres años hasta volver al escenario anterior». Asimismo, el representante de la patronal echó en falta una mayor colaboración de las administraciones para mitigar el impacto de estos encarecimientos de la energía y de las materias primas.

Asaja dio a conocer el pasado viernes un estudio sobre la subida de los precios de distintos apartados de los costes de producción del sector primario , como es el caso de los fertilizantes (hasta un 307 por ciento en el último año), los productos fitosanitarios (+48%), la electricidad (+270%), los plásticos (+46%) y la maquinaria (entre un 10 y un 25 por ciento).

Ante esta coyuntura, la patronal agraria reclamó al Gobierno central que, «para que estas subidas no repercutan en el eslabón más débil de la cadena alimentaria, que son el agricultor y el ganadero, la puesta en marcha de medidas urgentes financieras y fiscales para que así el productor pueda amortiguar este fuerte impacto en sus cuentas».

La ganadería ha sido también una de las grandes damnificadas por esta realidad. El último informe de coyuntura de la Delegación Provincial de Agricultura, Ganadería y Pesca indica que « continúa la necesidad de aportar alimento al ganado en extensivo , ya que las lluvias de otoño se retrasan y se van incrementado los gastos en alimentación , que son superiores que en otras épocas de sequía debido al incremento constante desde hace meses de las cotizaciones de las materias primas para pienso, como la soja, el maíz o los cereales, así como de los alimentos de volumen, principalmente la paja de cereal».

El presidente de la cooperativa Merinos del Sur , Gabriel Pineda, apuntó que la carestía de la electricidad no ha afectado en demasía al sector extensivo , aunque sí al intensivo por el uso de maquinaria específica . «Las materias primas han subido una barbaridad, como es el caso de los piensos, que lo han hecho en un 20 por ciento, y el del gasóleo, que se ha elevado un 30 por ciento», alertó el directivo de la compañía.

El colapso del transporte marítimo mundial también está dejando sus efectos en esta firma ovina. « Estamos teniendo muchas dificultades para enviar nuestras mercancías a países como Kuwait o Irak debido al aprovisionamiento de contenedores que ha hecho China», según remarcó Pineda.