Museos y espacios patrimoniales privados de Córdoba, al borde del cierre por la pandemia

Aunque la lista es larga, podríamos destacar como media docena de ejemplos significativos: Palacio de Viana, Casa de las Cabezas, Casa Sefarad , Torre de la Calahorra, Casa Andalusí o Museode la Alquimia . Con diferente grado de afección, todos ellos han sentido de manera notable el cierre de ciudades, regiones, países, movilidad... y el temor a viajar.

Viana, por ejemplo, se había convertido en una pieza clave de la iniciativa privada. La Fundación Cajasur-Viana ha logrado en menos de una década duplicar el número de visitantes al complejo de inmuebles y jardines de Santa Marina. En 2019 rozó los 200.000 visitantes y su atractivo sigue . Cajasur ha habilitado pases gratuitos en varias ocasiones a lo largo del año intentando catalizar al público local. Patios en octubre y la pasada Navidad han sido ejemplos de ello.

El perjuicio para el recinto del banco es más llevadero, en un principio, que el sello que puede dejar en iniciativas como la Casa Sefarad, que lidera Sebastián de la Obra como legado de la Córdoba judía, o Manuel Ramos en su Casa de las Cabezas , el creador, a su vez del Festival de las Callejas que tan buena aceptación tuvo y que apenas duró dos ediciones por problemas con el Ayuntamiento. Los costes de mantenimiento son una losa indudable para estos negocios que dicen sentirse agraviados en los planes de ayudas públicas.

«La situación es trágica y lamentable porque los museos privados se nutrían en más del 98 por ciento de turistas nacionales y extranjeros; sin ellos, sencillamente, es imposible abrir. Córdoba vuelve al nivel de los años 80 sin nosotros ni empresas privadas que han desaparecido. Hemos echado en falta estrategias comunes y diálogo con el Ayuntamiento», explica a ABC Ramos.

El propio investigador y notario incide la colaboración público-privada para aportar valor añadido al turismo en Córdoba y atractivo al visitante. De ahí que refiera la necesidad de crear un bono turístico cultural donde entren los pequeños privados con los públicos de Córdoba, apostar por festivales culturales originales o coordinar más el trabajo entre promotores y administraciones. Hay que recordar, como ya público ABC, que el Ayuntamiento de Córdoba se ha hecho con la propiedad del Festival Flora , una de esas iniciativas que junto a la ruta de callejas supusieron un revulsivo a la oferta habitual.

Otro de los propietarios de estos espacios museísticos -que prefiere no dar su nombre- se muestra muy pesimista y cree que la «inestabilidad económica, la tardanza en la vacunación y la vuelta a la normalidad va a seguir atosigando al turismo por lo que aguantar tanto tiempo va a ser muy complicado». Él es también de la opinión de Manuel Ramos en cuanto a la necesidad de que haya una mayor implicación del Ayuntamiento y otras ventanas públicas.

Ambas opiniones coinciden en otro aspecto como la movilidad y el efecto de las restricciones al tráfico hasta para los cordobeses y su acercamiento al Casco.