Acpacys ofrece sus servicios a unas 400 familias de Córdoba con algún afectado de parálisis cerebral

La presidenta de Acpacys, Rafaela Chounavelle , explicó durante el acto conmemorativo que este centro cuenta con una infraestructura única en la provincia donde trabajan 70 personas con nuevas tecnologías y terapias innovadoras, entre ellos fisioterapeutas, psicólogos, logopedas o terapeutas ocupacionales. Según Chounavelle, este equipo profesional es necesari o, ya que la persona con parálisis cerebral no solo tiene afección física o psíquica, cognitiva o sensorial, sino que manifiesta, en muchos casos, las tres. «Nuestras dificultades son abrir la persiana todos los días», advierte la responsable de la entidad refiriéndose al alto coste de su mantenimiento . Este centro asistencial situado en El Tablero Bajo cuenta con plazas para 28 personas en residencia de gravemente afectados; 24 personas en unidad de día, donde hacen talleres y comen; unos 102 niños de atención temprana de 0 a 6 años; y 96 usuarios que van a recibir tratamiento ambulatorio por las tardes.

De momento, lo único que tienen canalizado desde la Consejería de Salud es la entrada de los pequeños afectados por parálisis o enfermedades raras. «Desde el Hospital Reina Sofía , ya cuando lo detectan vienen aquí derivados ; también puede haber casos de personas mayores que no han tenido acceso o no nos conocen, pero son los menos», explicaron los responsables de Acpacys. «En la provincia hay centros pero no hay como Acpacys para hacer terapias novedosas, llegan incluso desde Jaén », recordó la responsable de esta asociación.

Otra de las tareas pendientes es sobre la visibilidad de la vida afectiva y sexual de estos enfermos y la lucha por eliminar tabúes y hacerlos visibles , bajo el lema «No mires para otro lado». En este área se ha trabajado mucho pero aún hay mucho por lo que avanzar, aseguraban padres y responsables del centro Acpacys. En la vida afectiva es otro handicap más, según los responsables de la Acpacys. «Las familias han negado durante años la sexualidad de sus familiares afectado, hay que ir pasito a pasito con este tema con mucha delicadeza a la hora de ser tratado», dijo.

Para Acpacys, Córdoba es complicada en cuanto a accesibilidad en las calles , centros o establecimientos públicos. «La ciudad es difícil para transitar con silla de ruedas, ahora el Gran Teatro ya es accesible pero queda aún mucho como poder ir la cine y que no nos dejen en la primera fila y nos duela la cabeza», afirmaron desde esta asociación. Mientras, el mercado laboral es otro de los handicap para estas personas. «Los empresarios ven una silla y se mueren de miedo. Hay prácticas pero no los contratan », denuncian.