Pletórica fiesta de los jugadores y la afición del Córdoba CF en la plaza de las Tendillas

Algunos millares más lo hicieron en la céntrica plaza de Las Tendillas de la capital cordobesa, que se convirtió en el punto central de la jornada a la espera de recibir a los héroes del ascenso. Gran Capitán durmió con la bufanda del Córdoba CF colgada en su cuello para celebrar el salto de categoría. Y el caballo con la bandera del Córdoba y una fecha contundente: 1954 , el año de la fundación del club.

Mérida fue una riada de cordobesistas durante todo el día. Lo mejor llegó con el emotivo recibimiento al equipo una hora y media antes del encuentro. Con todo, la euforia estuvo contenida en la primera mitad del partido. Desde Villanueva de la Serena llegaban buenas noticias con la ventaja del Villanovense al inicio del duelo. Todo explotó cuando los serones hicieron el segundo en el 93. Con el pitido final y la derrota del Cacereño comenzó la fiesta del cordobesismo en Mérida.

La grada comenzó a cantar el «¡Campeones, campeones, oé, oé, oé!» . El ascenso directo y matemático a Primera RFEF estaba en el bolsillo. Sólo había sido un año en las catacumbas de la cuarta división nacional por segunda vez en su historia. La Segunda RFEF, a falta de cuatro jornadas por disputarse, ya es historia.

La gran sorpresa para la afición del Córdoba llegó cuando el equipo saltó al terreno de juego para celebrar el ascenso durante el descanso. Una situación muy poco habitual en mitad de un partido de fútbol. El respeto al vestuario es norma fundamental. Ayer, el vestuario salió al césped. La plantilla saltó eufórica. Han sido meses y sobre todo muchas semanas esperando que llegara este momento que se veía venir desde hace tiempo, pero que no se concretó hasta ayer.

La fiesta del descanso fue corta. Más larga y entretenida fue la posterior al partido. Hubo manteo al técnico Germán Crespo . Cánticos con la afición de Javi Flores y el propio entrenador. Se vieron las primeras lágrimas de pura emoción. Hubo champán. El equipo acompañó al técnico en la sala de prensa. Las duchas pertinentes.

El equipo , con todo, estaba deseoso por volver . Comenzó el regreso a Córdoba poco después de las 22.00 horas. En ese momento, ya había centenares de cordobesistas que celebran el ascenso a Primera RFEF en plena Semana Santa en Las Tendillas. Cántcicos de todo tipo, incluso acordándose de los rivales.

Sin embargo, durante un par de horas fue una fiesta contenida . La plaza, con la fuente completamente vallada por completo para evitar que se dañara el monumento, fue acumulando gente. Se superaron los mil. Con todo, lo mejor estaba por llegar. Todos los bares de los alrededores de Las Tendillas estaban completamente llenos con seguidores cordobesistas esperando la llegada de los jugadores para acercarse a la fiesta final.

El colofón fue brillante. Los jugadores llegaron en el autocar directos desde el estadio Romano José Fo uto hasta la plaza de las Tendillas. Allí estaba todo preparado. Miles de cordobesistas ya se agolpaban para celebrarlo junto a los héroes del regreso a la tercera categoría nacional. Un paso adelante. El momento cumbre se vivió cuando el capitán del Córdoba, Javi Flores, puso la bufanda blanquiverde del equipo al Gran Capitán y la bandera del club al caballo , cerca de las dos de la madrugada, desde una grúa de los Bomberos de la ciudad que le sirvió para llegar hasta la estatua de la fuente.