Zapatero sigue en «perfil bajo» para evitar más problemas al PSOE
Convencido de que hizo bien en reformar la Constitución, ha retrasado la publicación de su libro sobre la crisis
GABRIEL SANZ
«José Luis asegura que ya puede salir a la calle o ir a un centro comercial sin que nadie le increpe», decía en mayo pasado a ABC una persona que pasó muchas horas con Rodríguez Zapatero durante una década. la anécdota ilustra ... la que está siendo su actitud de «perfil bajo», muy alejada de lo que hicieron Felipe González o José María Aznar .
Zapatero no quiere crear a su partido, el PSOE, más problemas de los que ya tiene. Sabe que los españoles todavía asocian la terrible situación económica que están pasando con determinadas políticas iniciadas bajo su mandato.
De hecho, esta Navidad tenía previsto publicar un libro explicando sus vivencia de la crisis, que está redactando con su primo y asesor José Miguel Vidal Zapatero , pero ha pospuesto el lanzamiento al año próximo, aseguran fuentes socialistas. Solo mantiene una colaboración esporádica en forma de artículo con un medio escrito, y alguna conferencia. El resto de sus presencias públicas están relacionadas con su nueva actividad profesional como consjero de Estado, siempre alejado de la pelea política de actualidad.
«Nos hubieran rescatado»
Quienes hablan con él sostienen que sigue convencido de que hizo lo mejor en cada momento y aunque, por ejemplo, el PSOE abjura ahora de la reforma constitucional para limitar el déficit público, en agosto de 2011, él sigue considerando que hizo lo correcto.
«Piensa que si España no aprueba esa reforma, nos hubieran rescatado», asegura una persona con acceso al ex presidente... y a ningún líder le gusta ser recordado como la persona bajo cuyo mandato España fue rescatada.
Su silencio público al respecto, en algo consensuado con el PP, explica bien por qué su figura sigue siendo tabú. Incluso cuando el partido quiere ensalzarle, como ocurrió recientemente con la ratificación, por parte del Tribunal Constitucional, del matrimonio homosexual, se dice con la boca pequeña.
«Hoy es un buen día para acordarse del presidente Zapatero», dijo la vicesecretaria general, Elena Valenciano ... Como si hubieran pasado diez años, no uno desde su salida del poder. Valenciano y su actual jefe de filas, Alfredo Pérez Rubalcaba , intentan amortiguar los intentos que, de vez en cuando, surgen en el partido haga una catarsis colectiva y pida perdón.
Ninguno de los actuales «barones» ha llegado a decir lo que el ex presidente de la Comunidad de Madrid Joaquín Leguina -«o enterramos el `zapaterismo´ o el `zapaterismo´ entierra al PSOE»- pero, en privado, la presión para un gesto así es mucha y la Dirección Federal lo sabe.
Admitir el error
Por eso, con cuentagotas, va pidiendo perdón a su manera. Rubalcaba, tras decir el presidente del partido, José Antonio Griñán , que fue «un error» la reforma constitucional porque el PSOE se ha atado de pies y manos para los restos a unas políticas neoliberales, dijo que él solo la apoyó por disciplina. Lo que es tanto como admitir el error. Y, recientemente, el PSOE ha admitido el error de no haber legislado contra los desahucios y haya tenido que llegar el PP a apropiarse de su `bandera´.
La rehabilitación política de Zapatero tendrá que esperar, «o acaso no llegará nunca», dicen los más críticos. La publicación de su libro levantará ampollas y, a buen seguro, las críticas más duras igual no le llegan desde el Gobierno y el PP porque en el PSOE muchos le tienen ganas...
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