Un polémico voto de un diputado del PP salva la reforma laboral de Yolanda Díaz

El primer susto lo dieron a primera hora de la mañana los dos diputados de UPN, Sergio Sayas y Carlos García Adanero , al advertir de que no estaban de acuerdo con la decisión de su presidente, Javier Esparza , de votar a favor de la reforma laboral. Horas después, en los pasillos del Congreso, uno de ellos aclaraba en privado que había que «cumplir» las «directrices» del partido. Es decir, la mayoría absoluta del Gobierno parecía asegurada. El debate se ha prolongado de nueve de la mañana a una de la tarde, y después ha continuado el pleno hasta pasadas las cinco. El resto de puntos en el orden del día, secundarios ante la incertidumbre de la reforma laboral, avanzaban como las manecillas del segundero del reloj. Muy lentos.

Por fin, a las cinco y cuarto de la tarde, la presidenta del Congreso, Meritxell Batet , ha anunciado que se abría el plazo para votar telemáticamente –solo habilitado para diputados con enfermedades graves, incluido el Covid – hasta las seis de la tarde. Y a las seis y cuarto ha comenzado la votación.

Los cálculos estaban hechos: 176 votos a favor y 173 en contra. Eran los números que se manejaban desde esta mañana con los confirmados votos en contra de PNV y del diputado no adscrito y ex de Cs, Pablo Cambronero . Batet ha leído las votaciones presenciales, las telemáticas, y ha comunicado : «El real decreto ley queda derogado». Las caras de Pedro Sánchez y de Yolanda Díaz, sumidos en el desconcierto, han sido lo más parecido –pero con mascarillas– a los rostros de los independentistas que presenciaron la suspensión de la declaración de independencia en 2017.

Batet, sin embargo, se había equivocado. Porque los votos a favor eran 175 y los votos en contra, 174. El diputado Sayas ha comunicado entonces que tanto él como García Adanero habían votado en contra, lo que descuadraba las cifras finales. Sin esos dos votos de UPN, los síes debían descender a 174. Y la rumorología ha apuntado pronto a un error en la bancada del PP .

Fuentes parlamentarias populares, nada más salir del pleno, decían que se trataba de «un error humano», sin intención política, y que el diputado Alberto Casero , el responsable, se había trasladado presencialmente a la Cámara Baja a intentar subsanarlo sin que se le hubiese permitido. Esa versión, sin embargo, ha sido matizada posteriormente, pasadas las siete y media de la tarde, por la portavoz.

Cuca Gamarra , en una rueda de prensa en la que no ha aceptado preguntas, ha garantizado que lo que en realidad se había producido era un error en el sistema informático de voto telemático. Según ella, Casero ha votado en contra, pero se ha dado cuenta de forma inmediata del fallo porque el sistema le ha enviado un certificado en el que figuraba que había votado a favor. La clave es que una vez se vota telemático, el reglamento impide el voto presencial. Pero el relato cambia sustancialmente entre la primera versión transmitida de manera informal por diputados del PP y la que después ha dado oficialmente Gamarra en la sala de prensa de la Cámara Baja.

Muy dura, la portavoz popular, ante la presencia del vicesecretario de Comunicación, Pablo Montesinos , y el secretario general del grupo, Guillermo Mariscal , ha acusado a Batet de «cacicada» y de impedir la entrada en el hemiciclo de un diputado. El PP mantiene que el diputado, al ver el error en el certificado de su voto, se ha intentado poner en contacto sin éxito con los servicios de la Cámara. Después, ha llamado a su grupo parlamentario y, pese a estar enfermo, se ha desplazado al hemiciclo para intentar corregir el fallo de manera presencial. Según Gamarra, el vicepresidente primero del Congreso, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis , ha comunicado a Mariscal que Casero no podía acceder al hemiciclo. «La convalidación de ese real decreto solo es posible con un voto con sentido diferente al emitido», se ha quejado Gamarra, que ya en el pleno había intentado tomar la palabra sin que lo haya permitido Batet.

Tanto el PP como Vox exigen una rectificación. Macarena Olona , que sí ha admitido preguntas de la prensa, ha avisado de que si la Mesa no rectifica, le pedirán formalmente que lo reconsidere antes de acudir en amparo al Tribunal Constitucional . Algo que ha anunciado también Pablo Casado en Twitter. La secretaria general del Grupo Vox, además, ha amenazado con querellarse por presunta prevaricación contra Batet si se demuestra que Casero había votado en contra y el sistema telemático ha registrado un voto favorable.

Esta noche, los representantes del PP en la Mesa se han reunido con la presidenta Batet para intentar que rectificase, aunque según fuentes presentes en el encuentro no ha dado su brazo a torcer. Las versiones son dispares y el fondo de la reforma laboral ha quedado claramente en un segundo plano. El portavoz del PSOE en el Congreso, Héctor Gómez , ha dicho que el sistema de voto es «garante» y tiene «doble comprobación». Según letrados consultados por ABC, una votación no se puede repetir salvo que se certifique que ha habido una disfunción o una intrusión en el sistema, informa Ana I. Sánchez .