La supervivencia de las diputaciones, protagonista del primer pleno del Senado

Cuando el líder socialista, Pedro Sánchez , y el de Ciudadanos, Albert Rivera , incluyeron en su pacto de investidura la referencia a la desaparición de las diputaciones, probablemente no calibraron la reacción que provocarían en el municipalismo. No sólo entre los populares, adversarios políticos e ideológicos, sino también entre sus propias filas: durante estas semanas, se han escuchado voces tanto en el PSOE como en C's a favor del mantenimiento de estos organismos, auténtico pulmón de los pequeños ayuntamientos y garantes, defienden desde el PP, de la igualdad de derechos entre los españoles que viven en grandes ciudades y los que lo hacen en pequeños municipios.

El Senado aborda este martes la espinosa cuestión en el pleno que inicia la XI Legislatura en la Cámara Alta. Lo hará el popular Juan Pablo Sánchez Sánchez-Seco , y contará con el calor que le transmitirán desde la tribuna del público los 15 presidentes del PP en diferentes diputaciones.

Pero su reivindicación del mantenimiento de estas instituciones y del reconocimiento de su importancia está en el corazón de otros muchos políticos de distinto signo y partido. Sólo así se explica que este lunes, la Junta de Gobierno Extraordinaria de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), convocada a petición del PP, acordara por unanimidad mostrarse a favor del impulso de las diputaciones. La nota oficial de la página web de la FEMP incluye el matiz de que lo aprobado es «impulsar las diputaciones redefiniendo su papel y su estructura».

La FEMP engloba a los más de 8.000 municipios, de todos los tamaños, que existen en España. Su vicepresidente, el popular Íñigo de la Serna -alcalde a la vez de Santander- lo explicaba al terminar la reunión extraordinaria: «La FEMP ha expresado con claridad que no está en absoluto de acuerdo con cualquier intento que exista de eliminar las diputaciones». Era la respuesta del máximo órgano del municipalismo español frente al «golpe mortal» que, según De la Serna, se les ha querido dar desde el PSOE y Ciudadanos.