El Senado insta al Gobierno a activar otro 155 con el rechazo expreso del PSOE

PP, Ciudadanos, Foro Asturias y UPN han votado a favor de una moción impulsada por el grupo popular para que el Ejecutivo de Sánchez remita otro requerimiento formal al presidente de la Generalitat, Quim Torra , como paso previo a la activación del 155. El grupo socialista, Unidos Podemos, los independentistas de ERC y PDECat, el PNV y Compromís han rechazado la iniciativa acusando al PP de competir en «radicalidad» con Ciudadanos.

Los de Pablo Casado han instado al Ejecutivo a actuar porque consideran que Torra está en una «escalda radical» que perturba seriamente el orden constitucional y la convivencia y debe ser atajado inmediatamente por el Gobierno de España. De hecho, defienden otro 155 más duro y extenso, que incluya el control de los Mossos, de la educación catalana y de TV3, que se libró de la intervención hace un año por expreso deseo de los socialistas.

El debate en el Senado ha desembocado en un cruce de reproches entre la bancada del PP y del PSOE. El portavoz del grupo mayoritario, Ignacio Cosidó , ha recriminado a los socialistas que hayan «cambiado el pacto con los constitucionalistas por un pacto con los independentistas».

Cosidó ha señalado que existe una «conveniencia política» y la «coincidencia de fondo» entre los independentistas, Podemos y Sánchez sobre la «necesidad de acabar con el régimen constitucional de 1978». Y ha denunciado que el presidente socialista mantiene un acuerdo con Iglesias, Puigdemont y Torra para no volver a limitar la autonomía catalana porque su futuro en La Moncloa depende de ellos.

Sin embargo, ha asegurado que pese al «Gobierno débil» del PSOE, España es un país con «instituciones fuertes» y la mayoría absoluta del PP en el Senado «es hoy una garantía de unidad y defensa del Estado de Derecho».

El portavoz socialista, Ander Gil , ha acusado al PP de «echarse al monte» y de competir en «demagogia y radicalismo» con Ciudadanos. Y ha atribuido como «herencia» de Rajoy que en Cataluña haya crecido «del 25 al 48%» los votos al independentismo, recordando que bajo su mandato se realizaron dos referendos ilegales, se aprobaron leyes de desconexión con el Estado y se declaró la independencia.

«Los socialistas jamás le dijimos que ustedes rompían España. Esta es su brillante herencia en Cataluña», ha censurado Gil reclamando «lealtad» al PP. Lo que hace el Gobierno de Sánchez, ha añadido, es aplicar «inteligencia intelectual» e «inteligencia emocional» para hallar una solución política dentro de la ley y a través del diálogo con el separatismo.

«Nos proponen dos tazas más. No, gracias», ha respondido a la propuesta del PP de activar otro 155, calificando de «temeraria» la moción debatida en el Senado.

Podemos y los grupos nacionalistas de la Cámara también han reprochado la actitud de los populares, que solo han recibido el respaldo de tres senadores de Ciudadanos -su portavoz, la diputada catalana Lorena Roldán no se encontraba en el hemiciclo-, de Foro Asturias y de UPN.

La senadora de En Comú-Podem Maria Freixanet ha señalado que el 155 «no es solución a nada», es más, ha considerado que PP y PSOE deben «pedir perdón» por haberlo activado el año pasado, y ha acusado a los de Cosidó de presentar esta moción para «malmeter» y competir por la «esquina ultra» con Ciudadanos y Vox.

El portavoz del PNV ha salido en defensa del Gobierno del PSOE, porque a su juicio trata de buscar una solución política y dialogada al conflicto separatista. «Nos toca ayudar, apoyar», ha afirmado Jokin Bildarratz tras recriminar al PP que se base en «sospechas» y no en hechos jurídicos para promover otro 155. A su juicio, no existe vulneración alguna de la Constitución por parte de las instituciones catalanas desde hace un año que justifique otra intervención del Estado.

El portavoz del PDECat, Josep Lluís Cleries , ha asegurado que el «único» golpe de Estado lo cometió el Gobierno aplicando un 155 de manera «ilegal». El representante de ERC, Miquel Angel Estradé , ha calificado la moción del PP como «un compendio de españolismo rancio y neofalangista». El senador de Compromís, Carles Mulet , que se ha quejado de que la Mesa rechazara su enmienda al texto por incoherente con el contenido de la enmienda, ha aseverado que el PP utiliza el Senado para «crispar».