Sánchez, Rivera e Iglesias sacan el máximo rendimiento a sus contados minutos con Obama

Los tres políticos hablaron de «generalidades» durante la hora que estuvieron esperando al presidente norteamericano en una sala de la base militar de Torrejón, según informó Podemos. Aunque inicialmente estaba previsto cada reunión durara 10 minutos, el tiempo se redujo considerablemente por el retraso de la comitiva, que llegó al aeródromo a las 16.15 horas. Poco después se iniciaron los encuentros en orden inverso de representación parlamentaria.

Así, el primero en pasar fue Albert Rivera, quien aprovechó sus minutos para transmitir el compromiso de su partido para fortalecer las relaciones entre ambos países, según informó el partido. También le explicó la situación política de España. Durante el encuentro, que Rivera calificó como «un placer», le anunció su intención de asistir a la convención demócrata de Philadelphia -el 27 y 28 de julio- en la que el partido designará oficialmente a su candidato a la Presidencia de EE.UU.

Una vez más, Pablo Iglesias protagonizó la anécdota al regalarle a Obama el libro «The Lincoln Brigade. A picture history», una publicación sobre los combatientes estadounidenses que se integraron en las Brigadas Internacionales durante la Guerra Civil española. En la dedicatoria, el líder de Podemos pidió al presidente que «transmita, por favor, al pueblo estadounidense la gratitud de los demócratas españoles por el ejemplo antifascista de aquellos héroes ». Iglesias evitó hablar de temas en los que choca con EE.UU., como su presencia en las bases de Rota y Morón. Según informó Podemos, durante el encuentro ambos hablaron sobre política europea y estadounidense e incluso Iglesias le trasmió su afinidad con el senador Bernie Sanders.

Para Pedro Sánchez fue un encuentro «cordial». El secretario general del PSOE utilizó sus primeros minutos para hablar de baloncesto, una afición que comparten, y luego viró a la actualidad política española y las relaciones España-EE.UU. Según informó el PSOE, parte importante de la charla versó sobre el Brexit y su impacto en Europa y en las relaciones EE.UU.-UE. A las 16.30 horas Obama ya se dirigía al Air Force One.