Sánchez aprueba en cuatro años 17.295 millones en grandes programas de armas

Algunos de esos proyectos fueron diseñados como parte de un nuevo ciclo inversor por el anterior Ejecutivo de Rajoy . Y, en ese ámbito, no hubo refriega política. Se siguió la línea trazada. Así, se dio luz verde con más o menos diligencia a los contratos de los 348 nuevos vehículos blindados 8x8 del Ejército de Tierra, la finalización de la construcción de los cuatro submarinos S-80, cinco fragatas de la clase F-110, 23 nuevos helicópteros de transporte NH-90, dos nuevos satélites militares o la modernización de la actual flota de 70 cazas Eurofighter del Ejército del Aire o los 17 helicópteros Chinook de Tierra.

Digamos que hay un cierto consenso entre PSOE y PP , con Podemos al margen de cualquier toma de decisiones. En total, en una tanda inicial de inversiones se llegaron a aprobar alrededor de 12.900 millones para poner en marcha esos proyectos y garantizar las inversiones en años futuros.

En una segunda oleada de inversiones o de compromisos a futuro, ya con el Gobierno de coalición y con un escenario pospandémico donde el rearme industrial del país es un ‘mantra’, España ha tomado decisiones para participar en el futuro caza europeo (FCAS) con 2.500 millones entre 2021 y 2027, la reconversión de tres aviones de Iberia A330-200 en multipropósito y tanqueros (MRTT, en el argot) por valor de 810 millones, 36 nuevos helicópteros para Defensa e Interior por 310 millones o la modernización del helicóptero Tigre po 1.185 millones de euros.

Todos estos proyectos tienen impacto en fábricas españolas de empresas como Airbus, Navantia, Santa Bárbara Sistemas, Indra, Escribano, Grupo Oesía, Sener, Saes...

Como parte de ese gran paquete de modernización militar , Hacienda también dio luz verde, en diciembre pasado, al denominado ‘Proyecto Halcón’ por el cual el Ejército del Aire comprará 20 aviones de combate Eurofighter por unos 2.000 millones para sustituir a los F-18 de la base de Gando, en Gran Canaria.

Estos aviones concluyen su vida operativa entre 2023 y 2024 por lo que la firma del contrato por parte del Ministerio de Defensa debería ser inminente, «cuestión de semanas» , según constatan fuentes militares a ABC.

De este modo, el Gobierno de Pedro Sánchez habrá invertido y comprometido gastos a futuros por valor de unos 17.295 millones de euros . Y todo esto fue antes de la guerra de Ucrania. España, que invierte actualmente el 1,02% de su PIB en Defensa, deberá elevar esa cifra hasta el 2% , según los comprimsos adquiridos en la OTAN.