Robles visita a las tropas en Letonia por Navidad: «Sois ejemplo de eficacia y compromiso con la paz»

Antes de reunirse con parte del contingente en un auditorio, donde se guardó escrupulosamente las medidas sanitarias por el Covid, la ministra pasó revista a las tropas y rindió homenaje a un monumento a los caídos erigido en la base.

Acompañada del jefe de Estado Mayor de la Defensa, almirante Teodoro E. López Calderón , la ministra hizo entrega al contingente de los tradicionales polvorones con los que suele cumplimentar en su visita.

En ese acto tuvo lugar un pequeño concierto navideño de uno de los militares que se desplazó hasta Adazi con la ministra. El soldado cantó ‘Blanca Navidad’, ‘Noche de Paz’, el famoso pasodoble de ‘La Banderita’ –popular entre las tropas españolas durante las guerras africanas– o la copla ‘Los Reyes de la baraja’, del poeta granadino Federico García Lorca. Tras ello, la ministra brindó con un vino «por el Rey». A lo cual se respondió al unísono «por el Rey».

Por su parte, el jefe del contingente, el teniente coronel Raúl Vara, destacó que «nuestro cometido es disuadir y en caso necesario actual ante amenazas que puedan venir desde el exterior».

Evidentemente esa amenaza proviene de Rusia. Precisamente, este viaje se produce en un momento crítico: el mismo día en que los presidentes de EE.UU. y Rusia, Joe Biden y Vladimir Putin , deben mantener una videollamada de cara a las negociaciones que la OTAN y Rusia retomarán el próximo 12 de enero con el objetivo de calmar la situación en la frontera con Ucrania, país que no es miembro de la Alianza Atlántica pero cuyo gobierno quiere dar pasos que le aproximen a ella.

El contingente español en Letonia forma parte del Grupo Táctico Multilateral (Battle Group) que lidera Canadá en la antigua base soviética de Adazi, situada a 25 kilómetros al norte de Riga y a unos 120 kms de la frontera con Rusia.

Junto a canadienses y españoles, esta unidad de disuasión de la OTAN en suelo letón está formada por militares de otros siete países: Albania, República Checa, Eslovaquia, Eslovenia, Italia , Montenegro y Polonia.

La misión también contribuye al adiestramiento y certificación de las unidades militares que pasan por Letonia, siendo numerosos los ejercicios de la OTAN o bilaterales con la brigada mecanizada de Letonia. Las condiciones de vida de la base, mejoradas desde el despliegue, pueden ser extremas en esos días que se alcanzan -20ºC. Este jueves la temperatura al aterrizar el avión de la ministra sobre el mediodía era de -5ºC.

España es el segundo país que más tropas aporta tras los canadienses pero el que más capacidades despliega en términos de potencia de fuego gracias a sus seis carros de combate Leopardo y catorce vehículos de combate Pizarro. Cabe subrayar que es la primera vez que España envía carros de combate a una misión exterior.

El Ejército de Tierra también aporta morteros pesados de 120 mm. y misiles contracarro Spike . Otras capacidades españolas en el batallón multinacional son «tiradores de precisión, aviones no tripulados para misiones de vigilancia o tiradores de precisión», según informa el Estado Mayor de la Defesa.

Los 350 efectivos españoles conforman el subgrupo táctico mecanizado, una unidad de ingenieros, diversos puestos dentro de la plana mayor del Grupo Táctico Multilateral y la brigada mecanizada letona a la que apoyan, una unidad logística y distintos militares en cuarteles generales multinacionales.

El grueso del contingente español está formado por militares de la Brigada Extremadura XI (Badajoz) aunque también hay efectivos del Regimiento de Infantería ‘Tercio Viejo de Sicilia’ 67 (San Sebastián), la Agrupación de Apoyo Logístico 61 (Valladolid) y el Regimiento de Transmisiones nº21 (Valencia).

La actual rotación española es la novena desde el primer despliegue en junio de 2017. Es una misión de seis meses de duración.

La misión española forma parte de la nueva arquitectura de defensa y disuasión de ‘Presencia Avanzada Reforzada’, aprobada por la Alianza Atlántica en la Cumbre de Varsovia (2016) y como consecuencia del estupor de la anexión ilegal de Crimea y el envío de tropas rusas a la zona del Donbás en Ucrania a países aliados como Estonia, Letonia, Lituania o Polonia. Estos cuatro países también forman parte de la Unión Europea.

Desde la primavera de 2017, una veintena de países de la OTAN despliegan con 4.000 efectivos, artillería y vehículos pesados (carros de combate y de combate de infantería) que aportan la capacidad de fuego necesaria en caso de tener que activarse el artículo 5 de la Alianza ante un ataque exterior a un país aliado.