PSOE y PNV sellan su acuerdo para la investidura y Bildu plantea a sus bases la abstención

La firma ha tenido lugar en una sala de la zona de Gobierno de la Cámara Baja. Sánchez y Ortuzar se han saludado ante los medios, después han firmado de pie el acuerdo y se han vuelto a saludar posando.

Tras saludar a sus colaboradores han abandonado esta sala que no tenía más decoración que la mesa sobre la que han firmado el acuerdo. En el acto han estado presentes, por parte del PSOE, José Luis Ábalos, Adriana Lastra y Rafael Simancas . Por parte del PNV ha acompañado a Ortuzar el portavoz de este partido en el Congreso, Aitor Esteban .

El voto afirmativo de los seis nacionalistas vascos se daba por hecho, aunque no se había cerrado formalmente. El PNV siempre es partidario de no dar nada por sentado pero siempre ha dado muestras en los últimos años de estar dispuesto a completar con sus escaños las mayorías. Lo ha hecho y lo hará con Sánchez pero también lo hicieron en el último Gobierno de Mariano Rajoy .

Esos precedentes daban pie a contar desde el inicio con sus votos. Aunque la semana pasada el portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban , reclamaba al Ejecutivo algún mecanismo de coordinación que permitiera a los nacionalistas vascos participaron previamente, antes de que se hiciesen públicas, en las decisiones del Ejecutivo.

Aunque el foco y el conflicto ha estado situado en las 13 abstenciones de ERC como clave para la investidura, los seis votos a favor del PNV son igualmente imprescindibles en la aritmética que necesita Pedro Sánchez para superar la investidura. Se sumarán a los 155 escaños que tienen PSOE y Podemos. Todavía faltará sumar, aunque está garantizado, el apoyo de otros minoritarios regionalistas.

En las reivindicaciones del PNV la cuestión nuclear es un calendario para completar las transferencias completadas en su Estatuto de autonomía. El Ejecutivo de Sánchez volverá a comprometerse con ello, aunque la transferencia de la Seguridad Social es un asunto espinoso, por ahora se aferran a que los propios nacionalistas han asegurado recientemente que es una aspiración que mantienen pero sin vincularla a corto plazo con la investidura porque «el proceso hasta su culminación será aún largo».

A la par del acuerdo entre PSOE y PNV la dirección de EH Bildu ha anunciado que someterá a una consulta de sus bases la abstención de sus cinco diputados «para no obstaculizar la formación del Gobierno entre el PSOE y Unidas Podemos».

Si ERC se abstiene finalmente los votos de Bildu no son imprescindibles. Pero por sí solos tampoco serían suficiente ni siquiera votando a favor. Aunque EH Bildu busca entenderse y actuar en paralelo a ERC en el Congreso, esto no era algo tasado.

El PSOE ya se ha reunido formalmente con Bildu, con el objetivo de favorecer posibles acuerdos futuros durante la legislatura. La consulta será vinculante y se convocará en breve una vez se conozca la fecha de investidura, según aseguran desde la formación abertzale.

Bildu justifica este paso porque entiende que « este Gobierno de coalición cumple otra vez con la palabra dada en la campaña electoral de impedir el acceso de la extrema derecha al Gobierno español».

Pero considera además que el Gobierno Sánchez-Iglesias puede abrir «una ventana de oportunidad para la resolución de los graves problemas estructurales que se desprenden del régimen monárquico del 78».

Considera Bildu que un Gobierno de esta naturaleza es «la última oportunidad del Estado» para demostrar «que existen condiciones para una democratización real del Estado».