El CIS mantiene al PSOE en primer lugar, pero el 74,5% desconfía de Sánchez

El CIS, tras realizar 2.989 entrevistas entre el 1 el 13 de enero , otorga a los socialistas un 29,9% de los votos, seguidos de Ciudadanos con un 17,7% y de Podemos y sus confluencias, que obtendrían un 15,4% . La gran sorpresa la ha protagonizado el Partido Popular, que quedaría relegado a la cuarta plaza con un 14,9% de los votos tras perder más de cuatro puntos con respecto al mes pasado. Vox mantendría su ascenso al obtener un 6,5 %, casi tres puntos más que hace un mes.

Estos datos se tienen que interpretar con cuidado porque solo un 47,2% de los preguntados afirma tener decidido su voto . Entre los motivos que harán oscilar los sufragios de un lado a otro destaca la cuestión catalana, ya que las políticas que se tomen en este sentido son importantes para un 42,9% a la hora de introducir la papeleta en la urna. En concreto, un 21,7% exige mano dura, frente al 34,8% que apuesta por negociar y a un 36,9% que reclama diálogo dentro de la ley.

Otra pregunta interesante es la valoración que los ciudadanos hacen sobre la gestión del Gobierno del PSOE: un 41,3% considera que es mala o muy mala , frente al 13,4% que la califica de forma positiva. No obstante, el 79,1% piensa que, si gobernara el PP, lo haría de igual o incluso peor forma.

La confianza en Pedro Sánchez también escasea entre los ciudadanos: un 74,5% asegura tener poca o ninguna. Al otro lado del tablero político, Pablo Casado se enfrenta a una situación similar al existir un 82,4% de ciudadanos que no confían en él.

Con respecto a las elecciones municipales, autonómicas y europeas del 26 de mayo, un 40,9% asegura que votará al mismo partido en las tres, mientras que un 33,4% votará a distintos partidos en cada una de ellas.

El conjunto de los líderes políticos suspende ante los españoles. El mejor valorado es Pedro Sánchez, pero se queda en un 3,8 sobre diez. Le siguen Albert Rivera -3,5-, Pablo Casado -2,9- y, por último, Pablo Iglesias -2,8-.

Pedro Duque , ministro de Ciencia, y Fernando Grande-Marlaska , ministro del Interior, reciben las mejores valoraciones dentro del Ejecutivo, pero tampoco aprueban: un 4,3 y un 4, respectivamente. Los peor valorados son Luis Planas , ministro de Agricultura y Pesca, y María Luisa Carcedo , ministra de Sanidad, ambos con un 3,2.

Quizás esto tenga mucho que ver con que muchos ciudadanos -un 72,7%- consideren que la situación política en España es mala o muy mala . Además, casi tres de cada diez encuestados estiman que será aún peor dentro de un año. La valoración de la situación económica tampoco sale bien parada: un 51,5% la cataloga como mala o muy mala, mientras que solo es buena para el 5,9%. No obstante, la economía está igual que hace un año para el 54,8%.

Las reacciones al barómetro del CIS no se hicieron esperar. Desde su cuenta oficial de Twitter, los populares aseguraron que «Tezanos es tan mal cocinero que pasa de chef a pinche de cocina. Es que te tienes que reír». Aludían así a la eliminación de la «cocina» , el trabajo sociológico con el que se interpretaban los resultados para obtener datos de estimación de voto más fiables.

Hace dos días, Tezanos criticó en el Congreso al resto de empresas encuestadoras por usar esa «cocina» y aseguró que el CIS ofrecía «datos brutos» que cada uno podía interpretar libremente. Además, afirmó que el objetivo no era acertar los resultados: «El CIS no es una bola de cristal» .

Adriana Lastra , portavoz socialista en el Congreso, salió ayer en defensa de Tezanos asegurando que «no hay ninguna otra empresa encuestadora en España con la capacidad del CIS». «Los datos son reales, no hay trampa ni cartón». Por su parte, Noelia Vera, coportavoz de Podemos, aseguró que recibían estos datos «con prudencia».

El barómetro se realizó entre el 1 y el 13 de enero, por lo que no tiene en cuenta las variaciones en la intención de voto que han podido causar la Convención Nacional del Partido Popular , en la que Rajoy y Aznar mostraron su apoyo a Casado, o el cisma producido en la cúpula de Podemos tras el portazo dado por Íñigo Errejón a Pablo Iglesias.