El congreso del PP balear podría tener finalmente sólo dos candidaturas

Hasta el momento, la candidatura que contaba con más apoyos en el seno del PP de las Islas era la del exconsejero de Agricultura, Biel Company , que la pasada semana había presentado su proyecto arropado por varios dirigentes relevantes de la formación, algunos de ellos antiguos seguidores de Bauzá. Company se enmarcaría dentro de la línea más regionalista de los populares isleños, mientras que Bauzá se situaría en la corriente usualmente denominada españolista.

Por lo que respecta al cuarto aspirante a ocupar la presidencia del PP balear, el exalcalde del municipio mallorquín de Montuïri, Jaume Bauçà, todo apunta a que finalmente se acabará integrando en una de las dos únicas candidaturas que realmente tienen opciones de ganar en el próximo congreso del partido. El cónclave regional, convocado para los días 25 y 26 de marzo, se celebrará bajo la fórmula de un militante, un voto.

El expresidente Bauzá fue el primero en postularse, el pasado mes de noviembre. Su anuncio fue recibido entonces con frialdad o incluso con críticas más o menos veladas por parte de la actual dirección del partido en Baleares. Al parecer, ni el actual presidente interino de la formación, Miquel Vidal, ni el secretario general, Sebastià Sagreras, ni la mayoría de dirigentes regionales habían sido informados previamente por Bauzá de su intención de presentarse para intentar dirigir de nuevo el partido.

Cabe recordar que Bauzá tomó las riendas del PP balear por vez primera en 2009, tras la renuncia de Rosa Estaràs por motivos de salud. Posteriormente, en 2010, fue el primer presidente del PP elegido en un congreso abierto, que ganó al imponerse al exalcalde de Calviá, Carlos Delgado. En aquella época, los populares se encontraban en la oposición en las principales instituciones de Baleares y sumidos además en una profunda crisis, por los casos de corrupción vinculados a la segunda legislatura de Jaume Matas como presidente autonómico, en el periodo 2003-2007.

Por decisión personal de Bauzá, en las elecciones autonómicas y municipales de mayo de 2011 el PP se presentó sin un solo imputado en sus listas —a diferencia del PSOE— y consiguió los mejores resultados de su historia . Así, en el Parlamento regional obtuvo 35 diputados sobre un total de 59 escaños. Como nuevo presidente autonómico, Bauzá recibió una Comunidad en situación de «quiebra técnica», heredada del segundo Ejecutivo de centro—izquierda que había presidido el socialista Francesc Antich.

En el inicio de su presidencia autonómica, Bauzá llegó a ser considerado un referente político a nivel nacional, en especial por su buena gestión, si bien a partir de 2013 empezó a sufrir un progresivo desgaste, sobre todo por la aprobación del decreto denominado Tratamiento Integrado de Lenguas (TIL), que preveía la implantación progresiva de un modelo educativo trilingüe y suponía en la práctica el fin de la inmersión lingüística en catalán en los colegios.

La respuesta de los docentes al TIL fue una huelga indefinida que se desarrolló entre el 16 de septiembre y el 4 de octubre de 2013. Además, el 29 de septiembre de aquel año tuvo lugar la manifestación más multitudinaria celebrada jamás en Palma, en la que más de 80.000 personas pidieron la retirada del citado proyecto lingüístico. Pese a todo, Bauzá optó por mantenerlo.

Dos años después, las elecciones autonómicas y locales de mayo de 2015 supusieron una auténtica debacle para el PP en Baleares. A pesar de seguir siendo el partido más votado en la mayoría de instituciones, en el Parlamento regional pasó de 35 a 20 diputados , sus peores resultados de la historia. Ello posibilitó la conformación de un nuevo Ejecutivo regional, presidido por la socialista Francina Armengol gracias al apoyo del PSOE, la coalición econacionalista MÉS y Podemos. Por su parte, Bauzá dimitió como presidente del PP balear el 17 de julio de 2015, forzado por el sector crítico. Vidal pasó a relevarle entonces de forma interina.

En cualquier caso, Bauzá se ve ahora con fuerzas para intentar liderar de nuevo el partido y aspirar a presidir la Comunidad tras los comicios de 2019. La ventaja inicial con la que parecía partir Company para imponerse en el próximo congreso, por los diversos apoyos internos recibidos, se diluirà en parte después de que Bauzá y Aguiló hayan decidido ahora unir sus fuerzas para intentar derrotar al exconsejero de Agricultura. El cónclave regional parece presentarse en estos momentos más abierto que nunca .