CC.OO. y UGT ven «con simpatía» un posible Gobierno «de cambio»

En rueda de prensa tras reunirse con el secretario general de la formación morada, Fernández Toxo ha subrayado que «peor que repetir las elecciones, que no sería bueno, sería repetir la misma forma de gobierno» de la pasada legislatura, que «ha dejado secuelas brutales» en forma de parados, pobreza, desigualdad y «recortes» de libertades.

Por eso, ve «con simpatía» que se pueda «aprovechar la oportunidad del cambio» que han propiciado los ciudadanos con sus votos, y que debe materializarse en un Gobierno que «refleje la intención» de los españoles, que el 20 de diciembre se «escoraron hacia el centro y la izquierda, por mucho que haya un empate técnico» en términos de escaños.

«El Gobierno que espero surja de estas negociaciones debe recoger este sentir amplio de cambio para poner fin a la gestión ultraliberal , que no reproduzca las formas (de la pasada legislatura), que negocie con Bruselas (una flexibilización de la consolidación fiscal) y que inicie de verdad un cambio de ciclo económico mirando a las personas y sus necesidades», ha insistido.

El líder de Comisiones Obreras ha admitido además que espera que las negociaciones entre el PSOE y Podemos «puedan tener éxito» y que se acabe consiguiendo un «amplio acuerdo» para tener un Gobierno en el corto plazo, aunque ha eludido «entrar en la estrategia de cada partido» a la hora de negociar, tras ser preguntado si habían pedido a Iglesias que retire el veto a Ciudadanos.

Sobre este mismo asunto, Cándido Méndez ha afirmado que los sindicatos no han acudido a la reunión «ni a pedir ni a recibir» pero sí a recordar a los partidos tradicionales que en este «nuevo escenario político» necesitarán de un «nuevo aprendizaje» mientras que los emergentes «también tendrán que saber interpretar esta situación sin cortapisas, barreras ni ningún tipo de obstáculo» de modo que las «aspiraciones de cambio» expresadas por la mayoría de la sociedad no acaben convertidas en un «fracaso».

De hecho, el líder de UGT cree que también los ciudadanos deberán aprender a «analizar con diferente perspectiva» al Gobierno, tras décadas de mayorías absolutas o quasi absolutas. «Ahora estamos en otra lógica y habrá que sobreponer la estabilidad social a la estabilidad política», ha apostillado.

Méndez también ha aprovechado para hacer hincapié en que cualquier dificultad económica que atraviese España está ligada al «frenazo» del crecimiento mundial y no a las «peripecias político-parlamentarias» del país, negando así de forma «rotunda» que el debate político abierto actualmente afecte a la recuperación económica.

Con respecto al contenido de la reunión, el líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha destacado las coincidencias con los sindicatos en torno a la «necesidad de estabilidad» que tiene el país y a la urgencia de revertir las «nefastas e ineficaces» políticas del PP.

En este sentido, ha destacado el «acuerdo» con las plataformas sindicales en torno a «buena parte» del programa económico de su formación, poniendo como ejemplo aspectos como la reforma fiscal, la derogación de las dos últimas reformas laborales o la recuperación de los derechos de los trabajadores; así como el rechazo al acuerdo de libre comercio de la UE con Estados Unidos (TTIP), que considera un «ataque» a la soberanía nacional y a los derechos de los trabajadores y de los consumidores.

Finalmente, ha explicado las prioridades de Podemos en un posible acuerdo de Gobierno, que incluyen un plan de rescate social , la lucha contra los desahucios sin alternativa habitacional, la lucha contra la precariedad y los bajos salarios, o la «voluntad» de dialogar posibles cambios en la Constitución con todas las fuerzas políticas y preguntando a los ciudadanos.

Fernández Toxo, por su parte, ha coincidido en que las prioridades deben ser un plan de emergencia social y un plan de choque contra el paro masivo, así como la recuperación del «cuadro completo de libertades democráticas» que se han perdido durante la pasada legislatura a resultas de normas como la Ley Mordaza o la reforma del Código Penal, para evitar así «regresar a un pasado al que nadie quiere volver».

Finalmente, el responsable de UGT ha reconocido «coincidencias muy acusadas» con Podemos , en relación particularmente al rechazo a «ocurrencias» como el contrato único o al TTIP, que a su juicio «significará la parálisis de la Europa social, política, democrática e incluso económica» y dejará la UE «reducida al esqueleto de la unión monetaria».

Por eso, junto con la búsqueda de un nuevo modelo de crecimiento «sólido y compatible» con el medio ambiente, la estabilidad laboral y la mejora de la productividad, Méndez aboga por reconducir «de manera inteligente» el objetivo déficit para hacerlo compatible con el crecimiento y el empleo. «No se puede poner el carro por delante de los bueyes. Cualquier política, incluso la reforma de la Constitución, deben supeditarse al empleo y la igualdad», ha zanjado.