El Gobierno gibraltareño cree que un triunfo de Podemos beneficiaría al Peñón

García, que ha protagonizado en los últimos días una nueva ofensiva de Gibraltar ante las instituciones europeas para contrarrestar las posiciones españolas sobre la colonia, habló ayer en un acto organizado por el «think tank» Centro de Política Europea, ante el que acusó al Ejecutivo de Mariano Rajoy de practicar una política hostil hacia el Peñón, de la que dijo que es «una continuación de la que empezó el general Franco».

La relación del ministro principal, Fabian Picardo, con el actual Gobierno español ha sido muy tensa desde el primer momento y especialmente al saberse que Rajoy había decidido abandonar el modelo del Foro de Diálogo Trilateral aceptado por el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero. Por eso, Gibraltar, suspira por un relevo en La Moncloa y, consciente de las dificultades para que el PSOE vuelva al poder, ha puesto sus esperanzas en una victoria de Podemos.

Ayer, García fue muy claro al asegurar que «un terremoto en el paisaje político español que lleve al partido Podemos al poder en Madrid, como dicen algunas encuestas, podría tener un impacto claramente positivo en la posibilidad de que los gibraltareños «ejerzan sus derechos a la libre circulación en tanto que ciudadanos de la UE».

Como informó ABC, recogiendo una noticia del Gibraltar Chronicle, Picardo reconoció en un debate en la televisión gibraltareña, que está en contacto con Podemos para tratar de ejercer una influencia sobre sus opiniones acerca de Gibraltar . El ministro principal considera que algunas de las ideas de la formación pueden ser «preocupantes», pero cree que «no tiene viejos prejuicios» con respecto al Peñón, como los partidos tradicionales.

Las opiniones de Podemos sobre la colonia británica son bastante desconocidas. Tan sólo uno de sus principales dirigentes, Íñigo Errejón, dijo recientemente en La Línea que el problema se debería solucionar «preguntando a la gente». En su conferencia en Bruselas, García reconoció que Podemos no ha formulado aún su política sobre Gibraltar, pero insistió en que "son más dispuestos y humanos en su enfoque y ciertamente más abiertos al diálogo". "Creo que esta es una luz de oportunidad al final del túnel", añadió.