Víctimas del terrorismo, como arma electoral y partidista

Desde el PP vasco se recuerda que en abril de 1999, cuando gobernaba Aznar y Jaime Mayor era su ministro del Interior, la Audiencia Nacional, con el visto bueno de la Junta de Tratamiento de la prisión de El Puerto de Santa María, puso en libertad al etarra Esteban Nieto, «Kromañón», que también padecía cáncer «terminal». «Kromañón» integró el «comando Madrid» junto a De Juana Chaos, Inés del Río y Antonio Troitiño. Cumplía condena de más de 2.500 años por una veintena de asesinatos, entre ellos los doce guardias civiles que perdieron la vida en el atentado perpetrado en la plaza de la República Dominicana. Murió seis meses después en su casa de Tolosa. Su excarcelación, recuerdan ahora desde el PP vasco, no suscitó las críticas que ha provocado, con Rajoy en el Gobierno, la libertad de Bolinaga. «Se mantiene la dispersión, siguen las operaciones policiales y los dirigentes de ETA tuvieron que abandonar Oslo por la negativa del Ejecutivo a negociar», concluye un portavoz de los populares vascos.

En este contexto, Santiago Abascal, que recientemente abandonó el PP para fundar el partido Vox, consideró ayer «coherente» la decisión de Mayor de no repetir como candidato. «Mayor Oreja es una persona que ha discrepado públicamete de la políticas del Gobierno, especialmente en materia antiterrorista. Por eso, actúa de una manera coherente». «El PP se ha divorciado de sus bases y está teniendo consecuencias», advirtió Abascal, para añadir que Vox aspira a «representar a muchos ciudadanos que no se sentían representados».