Basterra se enfrenta a sanción en la cárcel por uso fraudulento de las comunicaciones

Si prospera este expediente, y una vez determinado el tipo de infracción que habría cometido el interno, en situación preventiva, leve, grave o muy grave, se decidiría la sanción que corresponde. El abanico va desde las leves, castigadas con privación de paseos y actos recreativos comunes de hasta tres días , además de amonestación, hasta las muy graves (la más dura es el aislamiento en celda pero para ello el preso debe haber actuado con agresividad o violencia, o reiterar la falta, por lo que queda descartada). Si se establece que ha cometido una falta grave al usar de forma fraudulenta las comunicaciones que recoge la Ley Penitenciaria, Basterra podría ver restringido su derecho a comunicar al mínimo previsto.

Estas sanciones, recogidas por el Reglamento Penitenciario, son habituales cuando se infringen las normas. Uno de los presos más conocidos a quien se le han impuesto, también por uso fraudulento de las comunicaciones, es al líder batasuno Arnaldo Otegi, quien aprovechó una comunicación para grabar un mensaje animando a vaciar las cárceles y apoyando a Bildu que luego fue emitido en un mitin de EH Bildu en Barakaldo (Vizcaya).

Instituciones Penitenciarias consideró que había cometido una irregularidad al emplear las comunicaciones telefónicas para otro tipo de cuestiones que no eran mantener los lazos familiares. Cautelarmente se le prohibieron las llamadas y las visitas y más tarde, se le impusieron veinte días de aislamiento.

Fuentes penitenciarias han mostrado su malestar por el uso irregular de este derecho del interno, cuya causa además está aún bajo secreto. La prisión no va a tomar medidas contra el periodista, si bien se le prohibirá volver a visitar a Basterra .