terrorismo
Bildu, con los presos de ETA
A partir de hoy sus cargos institucionales exhibirán acreditaciones a favor de los «derechos humanos» de quienes purgan en prisión sus múltiples crímenes
Bildu, con los presos de ETA
Dicen que lamentan si alguna vez en el pasado, de manera aislada y, por supuesto, involuntariamente, han ofendido a las víctimas de ETA en medio siglo de terror. Pero siguen ofendiéndolas. A partir de hoy mismo, los cargos públicos de EHBildu llevarán una credencial con ... el lema «Derechos humanos, resolución, paz, Euskal presoak Euskal Herrira», esto es, que los presos de ETA sean trasladados al País Vasco y Navarra.
Dentro de esta campaña, la coalición tiene la intención de llevar esta misma reivindicación a todos los ayuntamientos, desplegando el cartel en un lugar visible. Así lo han anunciado los portavoces Pello Urizar y Rebeka Ubera, acompañados de Rufino Etxeberria, que han aprovechado la ocasión para advertir de que la manifestación que recorrió las calles de Bilbao el pasado día 12 en favor de los presos fue «una de las mayores» celebradas hasta la fecha y que, con ella, «la sociedad vasca interpeló a los gobiernos de Madrid y París, por su postura de bloqueo ante la posibilidad de resolución del conflicto y por basar esa política en gran medida en el incumplimiento de los derechos de los presos vascos».
Problemas en el «proceso»
Asimismo, Bildu considera que «al mismo tiempo también fuimos interpelados los agentes políticos, sindicales y sociales», ya que la sociedad «nos ha pedido compromiso a todos» para «terminar con la dispersión, para lograr el reconocimiento y respeto de todos los derechos humanos, para la resolución del conflicto y para la construcción de la paz.». A su juicio, en la sociedad vasca «existe acuerdo a favor de los derechos de los presos» y, por tanto, «sabemos que mientras no se cumplan los derechos de los pesos el proceso tendrá un insoportable peso que le impedirá avanzar». EH Bildu reconoce que «se han dado pasos adelante» en algunos campos relacionados con las «consecuencias del conflicto», pero considera que «aun queda mucho por hacer en cuanto a normalización, convivencia, conocimiento de todas las víctimas, etc». En su opinión, «sólo hay un ámbito en el que no se ha hecho nada», que «es el de los derechos de los presos».
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