El PSOE no quiere oír hablar de gran coalición

Cuando Susana Díaz , presidenta de la Junta de Andalucía, leyó anoche la oferta de Mariano Rajoy para formar una gran coalición PP-PSOE, rauda respondió vía Twitter: «Es patético y de perdedores» .

Y no es que fuera a ser la presidenta de la Junta de Andalucía más perjudicada por una operación que daría casi por finiquitada la etapa de Pedro Sánchez al frente del partido; es que Díaz cree, como la inmensa mayoría de los dirigentes socialistas que sería un «suicidio».

Máxime si, como pronostican las encuestas a los socialistas les va a costar mantener perfil propio de oposición de izquierda con un Podemos y un Pablo Iglesias fuertes en el Parlamento y en la calle.

Incluso Felipe González , autor intelectual de la propuesta de gran coalición hace ya más de un año, se vio obligado a aclarar meses atrás que su «reflexión» era interesante hace dos años. Y que la hizo como respuesta a la situación de emergencia económica que vivía España entonces, no como movimiento defensivo de los partidos del sistema frente a los emergentes.

Ahora, vino a rectificarse el expresidente del Gobierno, con Ciudadanos y Podemos pisando los talones al PSOE en voto, aunque no en escaños, es ya implanteable.

Eso es lo que dijo también el pasado miércoles en entrevista a ABC Alfredo Pérez Rubalcaba : Eel pacto PP-PSOE es imposible y Felipe González está de acuerdo en que no lo haya. No es una opción posible ni creo que fuera deseable».

En el equipo de Pedro Sánchez ni siquiera entran a valorar las palabras de Rajoy porque creen que forma parte de una estrategia de desgaste del adversario.

Con sus elogios a Susana Díaz, que anoche se apresuró a distanciarse vía Twitter, lo único que está buscando Rajoy es meter cuña entre los dos dirigentes socialistas para debilitar a Sánchez.