El Gobierno portugués eleva siete puntos la contribución de todos los trabajadores a la Seguridad Social

El jefe de Gobierno ha realizado un comunicado al país para dar a conocer las decisiones tomadas por su equipo para compensar el corte de los subsidios de verano y Navidad a funcionarios, que fue rechazado por el Tribunal Constitucional . El Ejecutivo ha buscado así otra forma de ahorrarse los 1.800 millones de euros previstos con la eliminación de las pagas extras tanto para trabajadores del sector público como para funcionarios.

Estas medidas entrarán en vigor en el 2013 y su duración dependerá de los resultados del programa de asistencia financiera. «Ponderando las varias hipótesis quisimos ser ambiciosos y rechazamos otras alternativas que se reducían al aumento generalizado de los impuestos», ha matizado el primer ministro, recordando que los Presupuestos del Estado que serán presentados «responden a la emergencia financiera».

El déficit previsto para este año era de 4,5% del PIB pero la quiebra de los ingresos fiscales estaba comprometiendo los objetivos. Durante las reuniones con la troika el Gobierno ya trabajaba con una estimativa del déficit del 5,3% y con estas medidas pretende bajarlo hasta el 5%.

En el segundo caso, el corte se va a mantener, pues la inconstitucionalidad se refería únicamente a los funcionarios. Dichos trabajadores van a contribuir igualmente con el 18% de su sueldo, en lugar del 11% actual, para la Seguridad Social, lo que en la práctica significa la pérdida de uno de los subsidios. Y el segundo de ellos será repartido a través de los doce meses de sueldo. Una subida ficticia porque el aumento salarial implica también un corte mayor de impuestos al subir de escalón. Hechas las cuentas, los trabajadores públicos vienen a perder prácticamente lo equivalente a las dos pagas extras anteriormente retiradas pero de esta forma esquivan la incosntitucionalidad de la medida.

Las empresas pasan a ser las más beneficiadas con estas medidas ya que pagarán por cada trabajador un 5,75% menos de contribución a la Seguridad Social, la llamada Tasa Social Única (TSU). «Reducimos costes para que las empresas sean más competitivas», ha explicado Passos Coelho. Teniendo en cuenta que «el paro ha alcanzado una dimensión intolerable» ha decidido «tomar la decisión que puede ayudar a resolver el problema». La reducción de la TSU ha sido siempre defendida por muchos economistas y por el Gobierno aunque faltaba conocer cuál serían las contrapartidas de dicho descenso.

Para el principal partido de la oposición «el Gobierno cometió hoy un gran error», según las palabras del líder parlamentar del PS, Carlos Zorrinho. «Falló las metas que se había propuesto», ha recordado, y «se preocupa únicamente de ser el buen alumno de la troika». Ha subrayado que la política del Ejecutivo luso es «austeridad sobre austeridad, cueste lo que cueste». Cree que «es tiempo de decir basta» y que debían haber optado por renegociar los ajustes con la troika .