Draghi, el guardián impasible

De hecho, los llamamientos de España, Francia e Italia a acelerar la puesta en marcha de las decisiones del último Consejo Europeo tienen en realidad como destinatario principal a Draghi, que está llamado a definir las dimensiones de la autoridad de supervisión bancaria, elemento fundamental para que los bancos españoles con problemas puedan recibir directamente las ayudas que necesitan, o para intervenir en nombre de los fondos de estabilidad de la zona euro en los mercados de deuda cuando países como Italia y España sean atacados en el mercado de la deuda.

Draghi participa sistemáticamente en las reuniones del Eurogrupo y además intervino muy directamente en la redacción del acuerdo de la cumbre de la madrugada del 29 de junio . Todo lo que dice es escrutado al milímetro por los mercados, incluso cuando el miércoles pasado al anunciar una rebaja de los tipos de interés de cuarto de punto reconoció que "se han cumplido nuestras previsiones de que la situación de la zona euro empeoraría".