El BCE desmiente una reducción del programa de compra de deuda

Por si acaso, los inversores están retirando sus posiciones en deuda, tratando de anticiparse al punto de inflexión del programa del BCE. El lunes se registraron nuevos mínimos históricos en la rentabilidad del bono español a diez años, en el 0,86%, y el interés de la deuda de referencia a diez años ha alcanzado ya el nivel del 1%. Las ventas se extienden también a la deuda alemana y ponen en peligro incluso la continuidad de las tasas negativas de interés en el bund. La rentabilidad de la deuda alemana a diez años se repliega hasta el -0,03% allí donde a finales de la semana pasada superaba el -0,15%.

Ateniéndonos a los hechos, el BCE no solamente no está reduciendo por ahora este programa sino que lo está acelerando. El mes pasado adquirió deuda corporativa por valor de 9.800 millones de euros , la cantidad más elevada desde el comienzo de aplicación del programa. Concretamente, la compra de bonos garantizados fue de unos 4.200 millones de euros y de bonos de titulización de 500 millones de euros, pero eso no quiere decir que sus responsables no sopesen en qué medida los efectos positivos del programa pueden ser compensados por los negativos en algún punto temporal y los expertos consideran que la retirada progresiva de los estímulos, comience cuando comience, imitará al plan ejecutado por la Reserva Federal entre diciembre de 2013 y octubre de 2014, por el que las compras de bonos se fueron reduciendo en unos 10.000 millones de dólares al mes para intentar minimizar el riesgo de shocks en el mercado.

Hasta ahora el BCE ha adquirido deuda pública por valor de 1,061 billones de euros dentro de su programa de expansión cuantitativa. Ha adquirido también deuda corporativa por valor de 29.722 millones de euros.